En época donde en varios lugares del mundo se definen nuevos clasificados al Mundial 2026, ganar dos partidos consecutivos a un rival europeo y a un clásico adversario, es motivo de alegría, pero también de cierta rabia. ¿Por qué el equipo empezó a funcionar ahora?
Una pregunta que ya no vale la pena contestar. Mejor quedarse con lo positivo. Hoy, Chile derrotó de buena manera a Perú por 2-1 y cerró con buenas sensaciones la gira a Rusia, que incluyó un 2-0 a favor ante los locales.
Los de Nicolás Córdova fueron más, mostraron carácter, y lo más importante, pasajes de buen fútbol que llaman a una esperanza, no desmedida, por supuesto.
En Sochi, las primeras acciones fueron favorables para La Roja, que salió a adueñarse del terreno de juego. Con actitud agresiva, Chile se metió arriba y a los 5′, Lucas Cepeda tuvo la primera muy clara.
El formado en Santiago Wanderers enfrentó solo a Pedro Gallese y cuando gatilló, su remate fue bien controlado al córner por el meta incaico. Mala definición del zurdo.
Perú no se encontraba y el cuadro de Córdova seguía dominando. Un tiro libre interesante de Marcelino Núñez fue otro acercamiento nacional.
Sin embargo, la Blanquirroja fue agarrando el control del duelo y cortando los circuitos de salida de Chile. Sin hacer mucho, al menos hizo que pasara el peligro. El único objetivo rival era que los nacionales no llegaran.
Regalo de Iván Román y Perú se pone en ventaja
Todo cambió, de forma inesperada, por un error no forzado. En una jugada que no traía riesgo, Iván Román salió de la peor manera tras recibir un pase hacia atrás de Marcelino Núñez (injustificado). El zaguero del Atletico Mineiro no controló bien, se le escapó el balón y no le quedó más que bajar en el área a Álex Valera. Expulsión, penal y 0-1 en contra.
Córdova tuvo que cambiar esquema. Ingresó Maripán por un poco efectivo Lautaro Millán. Y lo cierto es que La Roja siguió siendo más y creándose chances.
A los 40′ otra vez Cepeda vio el grito de gol ahogado gracias a una notable intervención de Gallese. La más clara fue de Alexander Aravena, que solo frente al pórtico y tras brillante habilitación de Darío Osorio, definió horriblemente.
Levantada de la mano de Osorio y guapeando con uno menos
En el complemento, el DT de La Roja mantuvo hombres y esquema. Y acertó. El equipo nunca resintió el hombre menos y mantuvo un estilo y agresividad que ilusionan.
Premio a los 52′ para el buen fútbol y la actitud. Tras un lanzamiento de esquina de Darío Osorio y pivoteo de Francisco Salinas, el balón le quedó a bocajarro a Felipe Loyola que hizo justicia igualando la cuenta. Merecido.
Perú quedó grogui. Es cierto que el clásico rival poco amenazó y debe haber dejado demasiadas dudas a los suyos, porque a los 59′ Osorio volvió a desnudar todas las falencias incaicas. Recuperó un balón en mediocampo, encaró solo y definió como los grandes. Apareció el zurdo que encandila en Europa, y que de seguir así, por fin puede ser el que guíe este nuevo proceso.
Después, vinieron cambios. Perú intentó con más ganas que buen fútbol. Fueron los momentos en donde apareció otro que está demostrando que se merece un lugar estelar de cara a las próximas Eliminatorias: Lawrence Vigouroux. Dos notables atajadas a los 69′ y 89′ demostraron que Chile tiene arquero para rato.
Un triunfo siempre lindo ante un rival clásico, que más allá del orgullo permitió ver a un Chile que, después de un año tan tormentoso, puede volver a ilusionarse.
¿Seguirá Nicolás Córdova? En Rusia, a diferencia del Mundial Sub 20, sí hizo méritos. ¿Suficientes para estar al mando de un proceso? Poco probable, pero en el fútbol chileno, nada se puede descartar. Por ahora, adiós 2025 y a pensar en el futuro.







