CarteleraEsta caída no estaba en las cartolas de nadie. Sí, es cierto, Perú llevó el partido ante La Roja, por la tercera fecha de la Liga de Naciones Femenina de la Conmebol, a los 3.400 metros sobre el nivel del mar de Cusco, una condición geográfica extrema, pero el dominio chileno sobre las incaicas era tan contundente en las últimas décadas que era imposible presagiar un 3-1 a favor de la Bicolor.
Un resultado expresivo, inapelable. La Selección dominó, tuvo muy buenas opciones de anotar (un cabezazo de Yanara Aedo a quemarropa, cuando el partido estaba 0-0, por ejemplo), pero cada contragolpe de las locales significó un descalabro en la zaga nacional.
Primer tiempo equilibrado en Cusco
Fue evidente que a La Roja la afectó considerablemente la altura. El bote del balón, la profundidad del pase, el pique, todo se vio afectado por la inusual condición geográfica. Pero también fue importante el significativo remezón de la zaga que hizo Luis Mena para afrontar este encuentro.
Camila Sáez a la izquierda, dupla inédita de centrales de Mariana Morales y Fernanda Pinilla, Rosario Balmaceda a la derecha (por lesión de Michelle Olivares Acevedo). Eso se sintió, porque la sensación fue que la última línea nunca se sintió cómoda en el Garcilaso de la Vega.
El primer tiempo fue equilibrado hasta la media hora, cuando una desinteligencia notoria del equipo chileno (un bote que engañó a Aedo y un mal pase de Nayadet López Opazo) terminó en el 1-0 para Perú, con el tanto de Alesia García.
Seis minutos antes del final de la primera parte, Nay López se reivindicó con un golazo para el empate: zapatazo desde 30 metros y 1-1.
Arranque letal de Perú en el segundo tiempo
Lo que pasó en los primeros minutos del segundo tiempo dejó totalmente sin respuesta a las chilenas. Perú se puso 3-1 arriba en apenas cuatro minutos. Luz Campoverde, a los 61’ y Raquel Bilcapé, a los 65, sentenciaron el triunfo incaico.
Un golpe muy duro para el equipo de Luis Mena. La Liga de las Naciones es un torneo corto, de solo ocho partidos, y un triunfo de Perú nunca estuvo en los planes de Chile, ni siquiera en los 3.400 metros de altitud de Cusco.
Cuando la Selección Chilena no había recibido hasta hoy gol alguno en el certamen, pierde un encuentro insólito. El martes viene Paraguay en Rancagua, un desafío que, en el papel, es muchísimo más duro que el de este martes ante las peruanas.