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anunció que está embarazada hace seis meses, dándole la exclusiva a la revista Vogue. Su portada se enfocó no sólo en la llegada del que será el primer hijo o hija de una de las modelos más reconocidas del mundo, si no que también hizo noticia la manera en
cómo la futura madre quiere criar a su bebé.
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Tanto ella como su marido, Sebastian Bear-McClard,
están convencidos de que no le impondrán un género especifico a su bebé.
Los futuros padres no quieren que le obsequien cosas según algún color o por el hecho de ser hombre o mujer. “Cuando mi marido y yo le hemos contado a nuestros amigos que estoy embarazada, la primera pregunta que me hacen siempre después de darme la enhorabuena es si sé qué quiero tener.
Pero a nosotros nos gusta responder que eso es algo que no descubriremos hasta que nuestro hijo o hija cumpla 18 años y nos lo haga saber”
, dijo Emily Ratajkowski, Luego añadió: “Todo el mundo se ríe cuando nos escucha decir esto. Pero hay una verdad en nuestra respuesta, una que insinúa posibilidades que son mucho más complejas que cualquier genital con el que pueda nacer nuestro hijo”.
La crianza de Emily Ratajkowski
La modelo ha reflexionado mucho de cómo va ser la crianza del nuevo miembro en su familia:
“La verdad es que, en última instancia, no tenemos ni idea de quién, en lugar de qué, está creciendo dentro de mi vientre. ¿Quién será esta persona? ¿De qué tipo de ser humano nos convertiremos en padres? ¿Cómo cambiarán nuestras vidas y quiénes somos nosotros”
, se preguntó. Para ella es importante romper las barreras de género:
“No es necesario culpar a nadie de caer en estas generalización sobre el sexo de los hijos”
.
"Pero a mí no me gusta que impongamos a las personas preconcepciones basadas en el género, y mucho menos a los bebés”
, defendió.
"Quiero ser una madre que permita que mi hijo se muestre ante mí.
Y, sin embargo, me doy cuenta de que, aunque espero
que mi hijo pueda determinar su propio lugar en el mundo
, se enfrentará, pase lo que pase, a las limitaciones innegables y construcciones de género antes de que puedan hablar o, diablos, incluso nacer “, terminó de expresarse la futura madre.
