Salma Hayek una vez más acapara todas las miradas, luego de protagonizar un episodio en el podcast "Armchair Expert" de Dax Shepard, donde hizo impactantes declaraciones acerca de su vida profesional y privada. Una de las cosas que más llamó la atención fue que, luego de 15 años, todavía debe defenderse de las acusaciones de que contrajo matrimonio por interés.
La actriz de 54 años nuevamente salió en defensa del multimillonario François-Henri Pinault, con quien se casó en 2009 en París. La mexica señaló que "me casé por amor, no por dinero", a pesar de lo que puedan creer muchas personas. "No es solo un insulto para mí, porque no soy la primera en ser juzgada por esto. No se pueden imaginar la alegría que es este ser humano", señaló.
"Y, ya sabes, cuando me casé con él, todos dijeron: 'Oh, es un matrimonio arreglado, ella se casó con él por dinero'. Yo dije: 'Sí, lo que sea, perra. Piensa lo que quieras.' Quince años juntos y estamos muy enamorados ", comentó al periodista, "Y ni siquiera me ofendo, digo, 'Sí, lo que sea", agregó.
Salma Hayek describió a su esposo de 58 años como un “hombre de familia” y aprovechó de aclarar que el dueño del grupo de moda de lujo “Kering” y presidente del holding “Groupe Artémis” no es como muchos lo pintan, como una persona llena de estereotipos “mágicos malditos” o que los hombres ricos son malas personas.
“Inmediatamente piensas que porque alguien es rico, puede que no sea una buena persona, podría ser alguien materialista, podría ser alguien que no tiene valores. Hay todas estas ideas preconcebidas y las escuché, por cierto", agregó.
La estrella de "Bliss" dijo que su esposo, con quien tienen una hija en común, Valentina de 13 años, cada vez que regresa a casa “es feliz de vernos a mi y a mis niños, siempre nos hace reír y cuando estamos de vacaciones, se asegura de apagar su teléfono celular y vivir ´el momento`”.
