La reina Isabel eligió unas particulares joyas para una reunión reciente, lo que dice mucho sobre cómo la monarca tiene a su difunto esposo, el príncipe Felipe, cerca de su corazón. Durante una reunión virtual con la Sra. Agnes Oswaha, embajadora de la República de Sudán del Sur, el martes, la reina complementó un vestido floral con el Broche de mariposa Onslow, una joya que solo se ha visto en público tres veces en la última década.
El broche de diamantes y rubíes, en forma de mariposa, fue un regalo de la condesa viuda de Onslow a la reina en su boda de 1947 con el difunto duque de Edimburgo. El momento de su resurgimiento fue simbólico solo dos días antes de lo que habría sido el cumpleaños número 100 del esposo de la reina, el príncipe Felipe , quien murió el 9 de abril.
El broche se vio por última vez en agosto de 2019 cuando la reina asistió a un servicio religioso en Balmoral. Antes de eso, lo usó en Norfolk para una reunión en el Instituto de Mujeres de Sandringham en enero de 2012 y en 2010 lo usó para recibir al presidente Paul Kagame, presidente de Ruanda en el Palacio de Buckingham.
La reina a menudo elige sus joyas para rendir homenaje a una determinada persona u ocasión. En un guiño romántico a su esposo, la reina celebró su aniversario de bodas más reciente en noviembre pasado con su broche de crisantemo, un broche de zafiro y diamantes que usó para una serie de retratos que se tomaron con él en su luna de miel en 1947.
El miércoles se reveló que la reina aceptó una rosa especial de la Royal Horticultural Society, la principal organización benéfica de jardinería del Reino Unido, en honor al centenario de su esposo. El monarca, que se ha alojado en el Castillo de Windsor en medio de la pandemia, celebrará el cumpleaños de Philip "en privado", dijo una fuente del palacio a la revista People.
Revisa acá una fotografía de la reina Isabel con su broche de diamantes y rubíes:
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