
A pesar de que Kim Kardashian esté estudiando para convertirse en abogada, no tiene planes de renunciar a sus selfies sexys ni a su estilo. Durante la primera parte de la reunión de "Keeping Up With the Kardashians", el presentador Andy Cohen le preguntó a la estrella de reality de 40 años si planea "dejar de presentarse de manera tan sugerente o sexy" en el siguiente fase de su vida profesional.
"Pensé en esto. Y luego pensé: 'Puedes hacerlo todo. Puedes hacer lo que quieras'", respondió Kardashian. "Recuerdo haber ido a la Casa Blanca una vez y estaba como: '¡Oh, acabo de publicar una foto en bikini, ya sabes, espero que no estén mirando mi Instagram mientras estoy aquí!' Y luego pensé: '¿Sabes qué? Tienes que ser tú'".
La fundadora de Skims agregó que le resulta "muy liberador" poder "sentirse bien consigo misma". "¡Tengo 40! Estoy en la mejor forma de mi vida y quiero publicar una foto en bikini si quiero", mencionó. Pero Kim Kardashian confesó que bajaría el tono de su mirada si alguno de sus cuatro hijos o Kanye West se sintiera incómodo.
"Tampoco quiero avergonzar a mis hijos o hacer que se sientan mal si están en la escuela secundaria y yo soy la madre vergonzosa que posa en selfies y bikinis. Habrá límites", agregó.