El príncipe Harry se desahogó en su autobiografía "Spare", sobre los acontecimientos que ocurrieron el día de la boda del príncipe William con Kate Middleton. Si bien confesó que estaba feliz por su hermano, también reveló los sentimientos tristes que lo embargaron al sentir que se alejaba de él. Primero, el duque de Sussex comentó lo bien que se llevaba con Kate. "Adoraba a mi cuñada. Es más, para mí era como la hermana que nunca había tenido, y me alegraba saber que siempre iba a estar al lado de Willy. Era la pareja ideal para mi hermano mayor", partió diciendo Harry. "Se percibía que eran felices juntos, y yo me alegraba por ellos. Pero, debajo de aquel techo tan detestable, no pude evitar pensar instintivamente que aquello era otra despedida. Otro desgarro", agregó. "Mi hermano, al que había escoltado esa mañana a través de la abadía de Westminster, acababa de irse... para no volver. Era evidente. Ya nunca más iba a ser Willy y solo Willy. Ya nunca más íbamos a cabalgar campo en Lesoto con la capa al viento. Ya nunca más íbamos a compartir una casa de campo con olor a caballo mientras aprendíamos a pilotar", añadió. "Sentí lo mismo cuando se casó mi padre, tuve el mismo presentimiento, y ¿acaso no se cumplió? Cuando comenzó la era Camilla, como ya había pronosticado, empecé a verlo cada vez menos. No hay duda de que las bodas son momentos felices, pero también son funerales velados, porque lo normal es que la gente desaparezca después de decir los votos", siguió diciendo. Luego, Harry comparó la situación de perder a su hermano con la jerarquía. "Mi hermano mayor había avanzado, había ascendido en la línea, y a partir de ese momento primero sería marido, luego padre, después abuelo y así sucesivamente. Otra persona, muchas distintas, y ninguna sería Willy, sino el duque de Cambridge, título elegido por mi abuela. Bien por él, pensé. Genial. Pero yo iba a perderlo igual", finalizó.