
Un complicado episodio vivió Kika Silva con su perro Gin, su bulldog francés que la influencer muestra a través de sus redes sociales. La mascota recibió la picada de una abeja, dejándolo al borde de la muerte si no hubiese recibido la rápida atención de un veterinario. Esto provocó que se alejara varios días de las redes sociales para ayudar a su mascota.
"Se puso a correr como loco, estaba desesperado. Lo agarré, pero no me dejó que le sacara la lanceta de la abeja que estaba ubicada en la pata. Partí a la veterinaria rapidísimo. Llamé al veterinario desde el auto y cuando llegamos ya tenían todo listo para pincharlo", contó la modelo a LUN.
Javier Yaconi, el veterinario del canino, es certero en su diagnóstico: "Si Kika no llegaba tan rápido a la veterinaria, es posible que Gin hubiese muerto. Él es muy alérgico y está categorizado como un paciente atópico, es decir, que puede reaccionar de manera alérgica a muchos factores, desde el césped a la comida".
Al llegar al recinto asistencial, el médico contó que el perro "venía muy agitado y se le estaba empezando a inflamar la garganta. Le pusimos una dosis de corticoides intravenosos y a los 10 minutos estaba más calmado".
En ese sentido, recomienda que ante este tipo de emergencias, el animal debe ser llevado inmediatamente al veterinario, "lo mismo si es una picada de araña u otro insecto", agregó.
Finalmente, Kika Silva confirmó que su mascota se encuentra en buen estado de salud, pese a la gravedad de lo ocurrido: "El doctor me recomendó andar siempre con una pastilla tipo corticoides por si llega a pasar lo mismo y yo me encontrara lejos de la veterinaria. En caso de una emergencia, eso me daría más tiempo", finalizó.