Roxana Muñoz fue una de las modelos más destacadas de la farándula chilena. Saltó a la fama por formar parte del elenco de Belloni en Morandé Con Compañía y luego por participar en diferentes realitys como Pelotón y Año 0.
Inmediatamente, su personalidad conflictiva llamó la atención enfrentándose a diferentes rostros de TV como Tanza Varela y Daniela Aránguiz. Sin embargo, la cúspide de su exposición mediática llegó cuando inició una relación con el exfutbolista Kike Acuña.
Entre acusaciones de violencia, drogas y alcohol, la expareja finalmente se separó y Roxana Muñoz decidió desaparecer completamente de la farándula para proteger a su hija Taira. Hoy, la modelo vive una vida alejada de las luces y está radicada completamente en el sur de Chile.
La nueva vida de Roxana Muñoz
En conversación con LUN, la modelo reveló que lleva viviendo casi un año en la comuna de Curacautín en La Araucanía. “Estoy esperando concretar un proyecto que me llena de ilusión y que me ha traído hasta acá sin importar todo el sacrificio que tenga que vivir. Sin duda el estar rodeada de naturaleza, tranquilidad y ver todos los días a mi hija decir que está feliz, ya con eso me siento orgullosa y agradecida”, partió señalando.
Frente a esto, Roxana Muñoz reveló que ella se ha hecho cargo de las remodelaciones de la casa y que incluso aún no tiene ni luz ni agua. “Un pueblo que crece día a día con gente muy amable, muy cariñosa”. La ex Pelotón conoció el lugar hace unos seis años cuando realizó un van camper junto a su hija Taira (12 años) y otros familiares.
“La experiencia ha sido increíble. No pensé que me gustaría tanto. Más que nada por el frío. Viví dos años en Algarrobo, en un edificio a orilla del mar y en invierno era muy frío y húmedo. Me gustó la experiencia, pero prefiero mucho más vivir en el sur. La gente, sus costumbres, naturaleza nativa, árboles milenarios, cascadas, parques nacionales, termas, volcanes. Es hermoso”, añadió.
Roxana Muñoz reveló que vendió todo lo que tenía en Santiago para poder venirse al sur de Chile, ahora está estudiando producción musical y junto a su pequeña hija hacen todo lo posible por seguir construyendo su futuro.
“Me organizo para dedicar tiempo a todo. Mi hija es súper power también. Estudia, le gusta tejer, tocar piano, cocina de todo. Es una muy buena partner. Le encanta. Está feliz viviendo acá en el sur, me lo dice todos los días. Sobre todo cuando cae nieve o cuando anda a caballo”, cerró.
