
El joven inglés de 21 años se despachó un tremendo remate de pelota parada que dejó estéril la volada del portero rival que nada pudo hacer para desviar el balón, en la apertura de la cuenta de los "Blues" ante Wolverhampton.
El joven inglés de 21 años se despachó un tremendo remate de pelota parada que dejó estéril la volada del portero rival que nada pudo hacer para desviar el balón, en la apertura de la cuenta de los "Blues" ante Wolverhampton.