Nicolás Jarry debutó con el pie derecho en el US Open, derrotando en un duro partido al joven francés Luca Van Assche en tres sets. Una victoria en más tres horas y media de juego que fue seguida atentamente por su familia, que se tuvo que quedar en Santiago viéndolo por televisión. Eso no impidió que sus dos hijos pudieran disfrutar con el éxito de su padre, incluído un Juanito Jarry que tomó la raqueta tras el partido, tal como su madre, Laura Urruticoechea, lo reflejó en redes sociales.
“Quedamos motivados y muy orgullosos”, escribió la esposa del número uno chileno, que volverá a la cancha este jueves por la segunda ronda del Grand Slam estadounidense.