El partido entre Deportes Iquique y Everton de Viña del Mar terminó lleno de polémica. No tan sólo por el reclamo público de los Dragones Celestes al arbitraje, sino por el encontrón de los jugadores de ambos equipos en dirección a camarines.
Los futbolistas se dijeron de todo y tuvieron que ser separados por los guardias del recinto. Un tenso compromiso, que terminó 2-1 a favor de los Ruleteros.
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(Créditos video: @TierraDragones)