Es, sin dudas, una de las lesiones más desgraciadas para cualquier deportista: romperse el tendón de Aquiles. Ahora le pasó al danés Holger Rune (11°), que en plena semifinal del ATP 250 de Estocolmo sintió cómo un pinchazo lo sacó de partido.
Ugo Humbert, su contrincante, de inmediato se dio cuenta de lo que pasaba era grave, pues su rival ni siquiera podía caminar con normalidad. El lesionado jugador, por supuesto, tuvo que abandonar entre lágrimas, y algunos reportes preliminares indican que estará ¡un año fuera de las canchas!
