Claudio Bravo es prácticamente un entrenador de fútbol en cancha. Cada vez que juega, el arquero de La Roja y del Real Betis imparte instrucciones a su defensa y ordena al equipo con constantes gritos y arengas, tal como lo hace un DT al borde del terreno de juego.
Pero nunca imaginó que uno de los mejores técnicos del planeta, y para algunos de la historia, le plantearía la posibilidad de dedicarse al rubro cuando finalice su carrera como jugador. Pep Guardiola, su adiestrado cuando estaba en el Manchester City, se lo dijo de frentón.
"Veníamos de una gira por Estados Unidos, llegamos a Inglaterra y me llama a la oficina y me dice: 'Quiero hablar contigo'- Subo y me plantea la opción de ser entrenador. Yo le dije: '¿Me quieres retirar? Yo pretendo jugar varios años más'", contó entre risas en diálogo con TNT Sports, agregando que se fue al club inglés pensando en el futuro de su familia, porque "las condiciones que me estaban ofreciendo en Inglaterra eran superiores a las que tenía en el Barça".
¿Pero por qué Guardiola citó al portero chileno para plantearle ser técnico? "Ahí me dijo que hay que visualizar cosas para el día de mañana, creo que tienes potencial para ser entrenador", reveló, dejando a Bravo reflexionando acerca de qué será de su carrera una vez que cuelgue los guantes.
Cabe recordar que Guardiola y Bravo compartieron cuatro años en el Manchester City, y juntos ganaron ocho títulos: 2 Premier League, 2 Community Shield, 3 Copa de la Liga y 1 Copa FA.