La relación entre Atlético Mineiro y Eduardo Vargas no terminó de la mejor manera. Claro, al delantero chileno y al club les hubiese gustado separar caminos levantando la Copa Libertadores, pero el fútbol tenía otros planes.
Turboman fue héroe y villano en la final ante Botafogo, al convertir el descuento pero errar dos goles cantados, y la historia del atacante chileno en el Galo, que comprende 4 años y medio, llegó a su fin.
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Para colmo, en Brasil dan cuenta de un inesperado hecho: el también atacante de La Roja decidió borrar todas las fotografías alusivas al Mineiro en su cuenta de Instagram, inclusive su carta de despedida, en la cual agradecía a todos en el club, pero también le mandaba un mensaje a sus críticos.
Los hinchas, obviamente, no se tomaron para nada bien este hecho. “Le queda prohibido decir que jugó aquí“, ”Chao chileno indolente" y “Tómate un Uber" fueron algunos de los negativos comentarios de la fanaticada.
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Fin del romance entre Eduardo Vargas y el Mineiro
Con esto, el romance entre Vargas y el Mineiro termina de una manera poco decorosa, aunque algo más tranquilo en lo deportivo, pues el último triunfo del equipo ante el Athletico Paranaense por 1-0 le permitió quedarse en la máxima categoría del fútbol brasileño.
Ahora, el ex delantero de la Universidad de Chile deberá darse a la tarea de buscar nuevo club para la temporada 2025, donde un regreso a la tienda azul, en principio, está totalmente descartado, ya que la intención del artillero es quedarse en Brasil por temas familiares.
