Esta semana se encontraron los restos de Kara Nichols, una joven de 19 años que fue vista por última vez por sus compañeros de habitación, el 9 de octubre de 2012 y cuya desaparición fue denunciada cinco días después.
La policía norteamericana atribuye el crimen a Joel Hollendorfe, un hombre de 46 años, quien ahora está detenido por asesinato en segundo grado. Además, se le acusa otro cargo por manipulación de pruebas, según un comunicado de la Oficina del Sheriff del Condado de El Paso, publicado por la revista People.
Cómo la policía resolvió el crimen de Kara Nichols
Este lunes fueron descubiertos los restos de Nichols en la granja ubicada en Colorado perteneciente a los padres del sospechoso. El cuerpo estaba envuelto en una bolsa de basura y había sido enterrada sobre la tumba de un caballo.
En 2014, la policía había registrado el lugar acompañado de perros rastreadores de cadáveres, quienes indicaron diferentes puntos que no fueron excavados por los agentes. En esa oportunidad, la madre de Hollendorfer le dijo a las autoridades que en los sitios señalados habían sido enterradas diferentes mascotas, según la declaración consignada por People.
Otra declaración publicada en el artículo da cuenta que la víctima había estado trabajando como acompañante en el momento de su desaparición. Así es que habrían encontrado diferentes mensajes de esa índole con el sospechoso, quien aseguró que nunca se reunieron, pero cuando la policía rastreó el teléfono de la joven confirmó que había viajado a la granja.
En la investigación fueron claves las declaraciones de la exesposa del victimario a la policía. Ella afirmó que una ocasión Hollendorfer le habría mencionado que "contrató a una acompañante y durante el sexo con ella en su automóvil, la estranguló accidentalmente hasta que murió".
Hasta ahora, Hollendorfer se encuentra bajo custodia con una fianza de un millón de dólares y se presentará en el tribunal durante la próxima semana, donde se espera que se se declare culpable.
