Las vacaciones siempre son bien recibidas, especialmente si son una recompensa por nuestro arduo y constante trabajo. Es por esto que los feriados progresivos son sumamente importantes para quienes laboran de forma dependiente.
Se trata de un día libre adicional que puedes pedir cada cierto tiempo. Para eso, hay cuatro requisitos que debes cumplir antes de hacer la solicitud correspondiente.
¿Cuáles son los requisitos para solicitar las vacaciones progresivas y cómo pedirlas?
Para poder ser beneficiario o beneficiaria de las vacaciones progresivas, deberás tener 120 cotizaciones previsionales (10 años) como trabajador dependiente en empresas privadas, ya sean continuas o discontinuas, con uno o más empleadores.
Pasado este tiempo, tienes que juntar 36 cotizaciones con tu empleador actual para poder optar por el día feriado legal, proceso que podrás repetir pasados nuevamente los tres años. Es decir, por cada tres años de trabajo con tu mismo empleador, te corresponderá un día extra de descanso.
Al cumplir estos requisitos, debes informar a tu empleador o empleadora que tienes este feriado adicional, para que lo puedas solicitar durante el año. Además, necesitas tener a mano el Certificado de Vacaciones Progresivas, documento que se puede solicitar en la AFP en la que estés.
¿Qué pasa si cambio de trabajo?
En caso de que cambies de trabajo, seguirás juntando tus cotizaciones para solicitar las vacaciones progresivas. Sin embargo, tal como mencionamos anteriormente, debes tener al menos 36 cotizaciones con el mismo empleador para hacerlas válidas.
Así, la cuenta comenzará nuevamente de cero y deberás esperar otros tres años para pedir tu día extra. Si continúas en el mismo empleo, a los seis años podrás pedir otra y así sucesivamente. En todo caso, si prefieres recibir dinero en vez de una fecha libre, puedes hablarlo con tu jefe y llegar a un acuerdo.