El dormitorio es uno de los lugares preferidos del hogar cuando de dormir o descansar se trata. Sin embargo, muchas veces pasamos por alto la limpieza de algún rincón o elemento que está dentro de ella.

Bajo ese contexto, existe una tela que utilizamos a diario y que no suele estar del todo limpia. Se trata de las sábanas, las cuales acumulan ácaros y bacterias, además de mal olor.

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Estas acumulan diferentes bacterias que no son visibles al ojo humano.
SábanasEstas acumulan diferentes bacterias que no son visibles al ojo humano.

¿Cada cuánto tiempo se deben cambiar las sábanas de la cama?

Según explicó a la BBC Lindsay Browning, neurocientífica y experta en sueño, lo recomendado es cambiar las sábanas al menos una vez a la semana. Como máximo, cada dos semanas.

En ese sentido, la experta mencionó que la higiene de esta tela es un factor importante, y una de las razones que más la ensucia es el sudor. “El sudor entra en las sábanas, lo que hace que no solo tengan un olor desagradable, sino que también (las personas) se obstruyan bastante”.

Asimismo, Browing añadió que las células muertas de la piel, de las que nos deshacemos durante el sueño, también son una preocupación, dado que se acumulan en la cama, lo que permite la llegada de los ácaros, los cuales pueden generar erupciones en la piel.

Beneficios de cambiar las sábanas de forma constante

  • Para alérgicos: Para las personas alérgicas, cambiar las sábanas con mayor frecuencia, como cada tres o cuatro días, puede ser aún más beneficioso al reducir la exposición continua a alérgenos.
  • Reducción de alérgenos: Cambiar las sábanas cada semana disminuye significativamente la presencia de ácaros del polvo y alérgenos, lo que mejora la calidad del sueño y contribuye a la salud general.
  • Prevención de olores y microorganismos: El sudor y otros fluidos corporales pueden causar olores desagradables y crear un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias, incluso sin que se perciba un olor fuerte.
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