
Miiko Albornoz tiene todo acordado para transformarse en el nuevo refuerzo de Colo Colo. Si bien el arribo estuvo a punto de caerse por la causa judicial que mantiene desde 2013 por haber tenido relaciones con una menor de 14 años en Suecia, en el marco de un vínculo del tipo estupro, el zurdo desembarcó este sábado en nuestro país y podría ser oficializado durante las próximas horas.
Si se logran a materializar las opciones, este será el primer periplo que tendrá el lateral izquierdo fuera del fútbol europeo. Su carrera la ha desarrollado íntegramente en el Viejo Continente. Por ende, el proceso de adaptación que tendrá en América del Sur es un completo misterio para el entrenador Gustavo Quinteros.
En 2008, cuando tenía tan solo 17 años, Miiko Albornoz realizó su debut absoluto defendiendo los colores del Brommapojkarna, cuadro que, en ese entonces, se encontraba en la segunda división del Suecia. El zaguero cuajó buenas actuaciones en sus primeras temporadas y alcanzó a disputar 82 encuentros en la institución que lo formó como profesional.
En 2011 llegó la primera gran oportunidad del lateral izquierdo, ya que fue traspasado al Malmo, uno de los clubes más poderosos del país. Pese a que el primer año fue de adaptación, el chileno-sueco jugó sus primeros partidos en copas internacionales y tuvo sus primeros acercamientos con el cuerpo técnico La Roja.
Posteriormente, cuando ya era titular indiscutido y una de las máximas promesas del balompié escandinavo, consiguió alzar la Allsvenskan (2013 y 2014) y la Supercopa (2014). En su paso por el cuadro azul, estuvo presente 83 veces en el campo de juego, destacando sus participaciones en Champions League y Europa League, y anotó en 5 oportunidades
La consagración de Miiko Albornoz en Alemania
Las buenas actuaciones en la liga de su país natal permitieron que Miiko Albornoz fuera traspasado al Hannover 96 de la Bundesliga. Para ese entonces, el futbolista ya había sumado sus primeros minutos con La Roja y se estaba preparando para disputar el Mundial de Brasil 2014.
Si bien ya no estaba en un club que protagonizaba los campeonatos, el chileno-sueco tuvo un aumento considerable de su nivel futbolístico en una de las ligas más poderosas de Europa. En los 6 años que defendió la tricota del cuadro alemán, el lateral izquierdo disputó 138 partidos, contando Primera y Segunda División, y anotó tan solo un gol.
Las últimas dos temporadas de Miiko Albornoz en el fútbol alemán sufrieron una considerable merma en su rendimiento futbolístico, por ende, la dirigencia del Hannover 96 decidió no renovarle el contrato para la presente temporada, lo cual facilitó de sobremanera el arribo del jugador al Estadio Monumental.