Felipe Reynero decidió cambiar de aires a mitad de temporada, desvinculándose de Coquimbo Unido tras no tener regularidad y arribando a Deportes Temuco en Primera B, donde ya realizó su debut en la victoria 2-1 del Pije sobre Deportes Concepción.
La llegada del delantero al equipo dirigido por Esteban Valencia guarda un profundo vínculo familiar y que el propio jugador se encargó de contar, señalando que uno de sus desafíos en el equipo sureño es ser reconocido como su padre.
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“Hay una pequeña presión acá. Está la huella que dejó mi padre en Temuco... Los desafíos me gustan, hay un doble desafío, uno es dejar huella como hizo mi padre y el otro, más grande, poder subir a Temuco a Primera División”, manifestó en palabras recopiladas por PrimeraBChile.
El vínculo familiar de Reynero con Temuco
El ex Cobresal es hijo de Roberto Reynero, quien tuvo un reconocido paso por el club en los años ‘90, en los que disputó 6 temporadas. Asimismo, es recordado por jugar en Universidad de Chile y ser capitán durante la campaña que militaron en la división de plata.

En esa línea, Reynero también dio a conocer cómo han sido sus primeras semanas en Deportes Temuco y cuál fue la reacción de su progenitor al llegar a su exequipo.
“Encontré un muy buen grupo, sabía que era una hermosa institución por lo que mi padre me había comentado. Cuando le comenté la noticia de que estaba la posibilidad de venir me dijo inmediatamente que sí. Estaba muy contento, mi familia, mi madre también", indicó.
Asimismo, el experimentado delantero señaló que el principal objetivo de la temporada es lograr el ascenso a Primera División.
”Las expectativas que tengo son muy buenas, altas, una vez dije, si me toca volver a la Primera B, tiene que ser un equipo grande, con aspiraciones a subir y así fue (…) vengo con la expectativa de poder subir con el club, vamos a trabajar para que eso suceda“, concluyó.