Nueve puntos menos por cotizaciones impagas y a remar se ha dicho. Así partió este 2025 Santiago Morning, cuadro que hoy es el único colista de la Primera B.
El cuadro dirigido técnicamente por Cristián Febre está a 5 puntos de Curicó Unido, que en estos momentos ocupa el puesto de la salvación con 24 unidades.
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El problema es que el tiempo apremia: se acaba el año y tan solo quedan cinco compromisos para que se acabe la temporada. Los Microbuseros deberán salir airosos de los choques ante Santiago Wanderers, Magallanes, Cobreloa, Unión San Felipe y San Luis de Quillota.
En Cancha tomó contacto con Diego Arias, atacante del Chago, quien confesó que pese a lo angustiante del momento, aún hay fe en el plantel...
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-¿Cómo se vive este duro momento en Santiago Morning?
-Con amargura, esa es la verdad, y más por cómo se nos han dado los últimos cinco partidos, que hemos perdido (el último fue empate) por errores de nosotros que son totalmente evitables. Eso te calienta y te frustra obviamente. Igual tenemos fe en que todavía se puede revertir la situación. Quedan cinco partidos y estamos ahí. Hay ganas de sacar esto adelante.
-¿Y cómo se hace para tener esa fortaleza? Salen a la cancha siempre como últimos de la tabla...
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-Es duro. A mí me tocó llegar ahora a mitad de año y el grupo viene de hacer un esfuerzo enorme para remontar esos 9 puntos menos de principio de año. El equipo ha pasado por esta situación desagradable de estar último durante todo el campeonato, pero el grupo se ve bien. Yo a todos los veo con ganas. Sabemos que se puede.
-Y más allá de ese castigo de los 9 puntos, ¿por qué dirías que Santiago Morning hoy es último en la Primera B?
-Nosotros hacemos nuestro mea culpa, claro, pero la verdad es que empezar con esa mochila a inicio de año hace todo más difícil. Hoy el equipo está a cuatro puntos del penúltimo y es valorable. Después, obvio que hay que ajustar algunas cosas, pero quedan cinco partidos y confío que se logrará el objetivo de mantener la categoría.
-Situación complicada para cualquier DT también. ¿Qué les dice Cristián Febre?
-El profe es un crack, lo vive a mil, nos contagia. Él es el primero en confiar en nosotros. Siempre apoya y tiene mucha fe. Nosotros lo vemos dándolo todo al borde de la cancha y eso nos enciende la llama también. No podemos bajar los brazos.
-Tuviste la oportunidad de jugar en equipos convocantes como Deportes Temuco y Santiago Wanderers. ¿Cómo se hace para motivarse en un club que no lleva mucha gente a los estadios?
-Sí, me ha tocado jugar en equipos importantes, pero yo vine acá con el objetivo personal de querer jugar, porque no estaba jugando mucho, estaba con muchas intermitencias. Lo otro es algo anexo nomás, anecdótico. Obviamente, es bonito jugar siempre con 7 mil u 8 mil personas, pero en lo personal no influye. Yo quiero hacer las cosas bien simplemente. Demostrar lo buen jugador que soy.