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Cuando la mente no resiste al fútbol: los emblemáticos casos de futbolistas con depresión

Pese a la estabilidad financiera que entrega el fútbol, muchos jugadores ceden ante la presión de una actividad que genera miles de millones de dólares. El caso de Borja Valero vuelve a colocar el tema en el tapete.

Las declaraciones de Borja Valero sobre su visión del fútbol trascendieron más allá del mundo del deporte. La negativa respuesta del exjugador de la Fiorentina sobre si volvería a escoger el balompié como profesión deja una típica interrogante en el aire. ¿Por qué los jugadores, pese a ganar tanto dinero, tienen problemas de salud mental? La lista de jugadores que han sufrido por la presión y exigencia del fútbol es amplia. Valero no es el primero ni será el último.

"Tal vez ahora no volvería a ser futbolista. No sé si merece la pena. Tengo una buena vida gracias al fútbol, pero podría haberla tenido sin serlo. He disfrutado de muchos momentos. Sin embargo, el fútbol es mucho más de lo que ves en la televisión. El 98 por ciento de las veces un futbolista dice lo que puede, no lo que piensa", confesó el actual jugador del Centro Storico Lebowski de la sexta división italiana a La Repubblica.

El caso del futbolista, quien fuera compañero de Matías Fernández, David Pizarro y Erick Pulgar en Fiorentina, así como también de Alexis Sánchez en el Inter de Milán, se suma al de muchos futbolistas, tanto nacionales como internacionales. Una investigación realizada en 2018 por la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) arrojó que el 38 por ciento de los jugadores ha sufrido problemas psicológicos en algún momento de su carrera.

"Ser futbolista es una de las fantasías más populares"

El psiquiatra León Cohen se refirió al proceso que atraviesan los jugadores desde su formación y cómo esto se vincula con el querer llegar a la actividad profesional. "El ser futbolista es una de las fantasías más populares. Tiene que ver con la visibilidad del fútbol y porque, aunque ya no tanto como antes, forma parte de la vida infantil del barrio. Eso origina placer", comentó.

El exportero de la U comentó los principales motivos por los que los jugadores tienen problemas en la alta competencia. "Al mismo tiempo, la dinámica profesional implica deberes y sacrificios. Pero, sin duda, la parte más complicada para un futbolista es el duelo del retiro, cuando termina su carrera. Tomar conciencia de que te queda poco es muy difícil: una es la realidad del cuerpo y otra es la realidad de la mente. Y es un verdadero arte ir equilibrando eso", concluyó Cohen.

Son conocidos los casos internacionales, que van desde Jesús Navas hasta Per Mertesacker. Por su parte, en Chile también hay futbolistas que han padecido problemas de salud mental, siendo los más emblemáticos Mathías Vidangossy y Mauricio Pinilla.

Cuando la presión afecta a la mente: Mertesacker, Iniesta y un doloroso suicidio

Las declaraciones de Borja Valero hacen eco de un tema que cada vez genera más ruido en el fútbol. La salud mental es un tema que no pasa desapercibido, más aún considerando los recientes casos. Pese a que la mayoría de los problemas de los jugadores han sido durante su carrera, gran parte los ha confesado recién cuando pudieron superarlos.

Uno de esos casos es el de Per Mertesacker. El exjugador del Arsenal, campeón del Mundo en 2014 con la selección de Alemania, confesó en 2018, a meses de su retiro, los problemas con la presión que se recibe en el fútbol. "La presión del fútbol me devoraba" aseguró en aquel entonces a Der Spiegel. El zaguero, a su vez, declaró que, debido a los nervios, vomitaba antes de cada compromiso que debía enfrentar.

Uno de los jugadores destacados que sufrió con el fútbol fue Andrés Iniesta. El campeón del Mundial de Sudáfrica 2010 con España explicó en su autobiografía que tuvo depresión. "Estuve en tratamiento con una psicóloga. Siempre me acordaré de las ganas que tenía de ir a la consulta, por lo que llegaba hasta 15 minutos antes. Me llegué a encontrar muy mal. Necesitaba algo para salir de la situación en la que estaba. Deseaba que llegase la noche para tomarme una pastilla".

Otro campeón del Mundial de Sudáfrica 2010 se suma a la lista de jugadores que tuvieron problemas de este tipo. El jugador de Sevilla, Jesús Navas, tuvo que abandonar la concentración de la selección Sub 21 para el Mundial de la categoría, en 2005. Una crisis de ansiedad lo marginó de la cita mundialista juvenil. "Me ocurrió aquella vez y luego me daba miedo que me volviera a ocurrir. Ese era mi miedo. Pero ahora ya estoy bien, tranquilo, muy a gusto", declaró en 2010 a El Mundo.

Tras su debut en Barcelona, Bojan Krkic fue bautizado como "el nuevo Messi". Sin embargo, tal como mencionó a The Guardian en 2018, los problemas de salud mental mermaron su rendimiento en el fútbol. "No fui a la Eurocopa de 2008 porque tenía problemas de ansiedad, pero dijimos que era porque me iba de vacaciones. Para mi debut internacional me dio un ataque de ansiedad, pero dijeron que tenía gastroenteritis. Nadie quiere hablar de eso. Al fútbol no le interesaba", señaló.

Cierra la lista internacional el caso de Santiago "Morro" García. El 4 de febrero de 2021 el delantero e ídolo de Godoy Cruz se suicidó, tras una larga lucha contra la depresión. En junio de 2019, declaró en radio Nihuil sobre los futbolistas y los estados de ánimo en la cancha. "No somos robots, no estamos hechos de acero. Nos pasan cosas y eso hace que el rendimiento dentro del campo de juego no sea el óptimo", señaló el "Morro".

En Chile también hay problemas de salud mental

Al hablar de salud mental en el fútbol chileno hay dos casos que aparecen casi automáticamente en el consciente colectivo: Raimundo Tupper y Marcelo Barticcioto. Ambos exjugadores sufrieron depresión endógena, lo que no vincula sus problemas psicológicos al fútbol. Sin embargo, hay casos de futbolistas que sí han visto afectada su estabilidad emocional por el deporte.

El más bullado de los últimos tiempos es Mathías Vidangossy. El actual volante de Melipilla confesó dramáticamente lo que le tocó vivir por la depresión que padecía. "Me quedaba pegado en lo que me decían los hinchas, me quedaba enganchado de eso. Me decían de todo. Eso fue fuerte. Yo intentaba hacerlo y las piernas no me respondían. No era fácil, era todo sicológico", señaló en mayo de 2021 a La Tercera.

Otro caso es el de Mauricio Pinilla. El exdelantero de la U tuvo un oscuro momento tras llegar a Escocia en 2006. En conversación con Canal 13, el retirado jugador recordó tales momentos. "Llegó un momento de tanta desesperación que no podía dormir, andaba con las pulsaciones a 200 por hora. Tenía angustia. Quería dejar de jugar. Estaba nublado. Me sentía pésimo. Estaba con depresión, con crisis de pánico. Mi cabeza no estaba preparada para tomar ningún tipo de decisiones", señaló.

Pese a no declarar una enfermedad de salud mental, el formado en Universidad Católica y actual arquero de Palestino, Cristopher Toselli, confesó sus problemas por la autoexigencia que se sufre en el mundo del fútbol. "Soy súper autoexigente y las expectativas que tenía de mi carrera eran distintas. Hasta el día de hoy no estoy tranquilo ni relajado. Ojalá fuera así, porque sufriría menos. Me pondría menos presión y disfrutaría mucho más", explicó a El Mercurio en agosto de 2021.

Estos problemas no solo afectan a los jugadores de Primera División. Tras viajar desde Uruguay, Leandro Reymúndez se integró a Deportes Iberia de Segunda División en 2021. Por la pandemia, el jugador debió dejar a su familia, lo que le afectó en lo mental, y lo llevó a desarrollar un cuadro de depresión. Pese a todos los inconvenientes que generaba la pandemia en los desplazamientos internacionales, el jugador pudo volver al fútbol charrúa.

"Llegó un momento en el que ya no soportaba la situación, porque no me conocía directamente. Obviamente lo hablé en el club, porque se daban cuenta de que yo no estaba bien. Llegaba al departamento y era una esclavitud estar acá. Como que me sentía preso, de no poder irme a Uruguay y de no traer a mi familia. Mi cabeza era solo angustia, tristeza. Me levantaba con dolor en el estómago. Cada día se me hacía peor. No comía. Lo poco que comía, me caía mal", comentó a AS en junio de 2021.

Un caso vinculado a ese país es el de Williams Martínez. El exjugador de Huachipato y Palestino se suicidó en julio de 2021 por problemas ligados a la depresión. Con 38 años, el fallecido futbolista se mantenía activo en Villa Teresa, de la Segunda División de Uruguay.

Así fue la presentación de Borja Valero en equipo de la sexta división de Italia

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