Fernández Vial perdió la categoría en la Primera B, por lo que la próxima temporada tendrá que jugar en la Segunda División. El "Almirante" al descender tendrá que reestructurar completamente el equipo para afrontar el 2023. La tercera categoría del fútbol chileno tiene otros requerimientos en cuanto a futbolistas extranjeros y también en límites presupuestarios en los planteles, incluidos el cuerpo técnico, que su conjunto debe tener un coste de 30 millones de pesos brutos mensuales, según las bases de este torneo,un reglamento que se podría modificar en este punto de cara a la próxima campaña.
Uno de los jugadores que fue parte del equipo de la Octava Región en la complicada temporada fue el defensor, Patricio Jerez, que confesó el dolor que se vivió en el de regreso tras la derrota de visita por 2-1 ante Unión San Felipe en la última jornada: "Hubo lágrimas y en el bus nadie quería hablar. Te quedas sin palabras", dijo en diálogo con Diario Concepción.
El zaguero sintió mucho la perdida de la categoría debido al afecto que le tiene a la institución: "Bajar te marca como jugador y más si sientes cariño por el club. Si me preguntan qué siento, diría que tristeza, dolor, desazón y todos los sinónimos. Yo y mi familia sentimos algo especial por el Vial, es una institución que logra eso, la gente te sigue a todos lados, hasta cuando no puede entrar el estadio, y es lamentable no cumplirles, perder la categoría".
Jerez se refirió al cambio de entrenador que tuvieron cuando el club despidió a Claudio Rojas, trajo a Patricio Lira y en las últimas dos fechas recontrató al DT que empezó el torneo: "En la primera rueda no se estaban dando los resultados, pero siempre creímos que lo dábamos vuelta, por la calidad de jugadores, por lo que hizo casi este mismo equipo el 2021. El equipo no estaba jugando mal y era protagonista, pero se fue Claudio (Rojas), llegó Lira y nunca agarramos vuelo. El cambio no dio resultados".

Además se refirió a las molestias físicas que sufrió durante la temporada: "Personalmente fue un año malo, de muchas lesiones. Aún así el hincha me tiraba buena onda, siempre he sentido respeto, cariño. Solo puedo esperar lo mejor para Vial, que ojalá suba luego y se pase este mal momento. Es lo que merece este gente".
Para finalizar hizo un comentario sobre lo que fue la derrota más reciente ante el Uní Uní: "El último partido es un reflejo de todo lo malo del año. Mala fortuna, malas decisiones. Con uno menos, igual teníamos el partido controlado y, de alguna forma, lo perdemos al final. Pudimos hacer el 2-1 un poco antes y no cayó. Fue así todo el año, no bajamos en este partido ni el anterior. Cuando pasa algo así es porque se hicieron muchas cosas mal, todos los que tienen relación con el club y este es el desenlace de esos errores".