
La derrota de Santiago Wanderers ayer ante Curicó Unido en Valparaíso sentenció su descenso a la Primera B. El conjunto porteño ya no tiene chance matemática de quedarse en la primera categoría, y aunque resten aún tres partidos en el Campeonato Nacional ya están en modo 2022.
Con la realidad futbolística a la vista, ahora se desnudó la económica, que para varios es mucho peor. La dirigencia de los "Caturros", en ese sentido, es firme en su postura, y ya advierten que no se pagará lo mismo el próximo año.
"Existe un tema económico en todo esto, es de público conocimiento que nos van a bajar considerablemente los ingresos por televisión y hay que tomar determinaciones ante eso, tenemos jugadores a los que en Segunda División (sic) -Primera B-, no les podemos pagar los mismos sueldos que en Primera. Esa realidad ellos no la ven, sólo piensan en su bolsillo. Y si son tan wanderinos deberán ajustarse a la realidad que viene el 2022", señaló Andrés Sánchez, presidente de la comisión de fútbol de la sociedad anónima, a El Mercurio de Valparaíso.

El dirigente también explicó la situación de Mauricio Viana, al cual califica como un "líder negativo del camarín": "Él tiene contrato vigente. Nosotros no estamos diciendo que va a irse, sino ver cómo solucionamos su situación, porque él nos dijo que no se quería quedar. A los que vencen contrato también los vamos a evaluar, les plantearemos las nuevas condiciones económicas y ellos verán si aceptan y quieren quedarse en el proyecto. Los que no quieran, y tengan ofertas mejores, se pueden ir".
Ahora Santiago Wanderers se concentrará en terminar de la mejor forma el torneo, donde aún le restan tres partidos, aunque todavía no resuelva si lo hará con juveniles o se pondrá en la buena con los pesos pesados del plantel. Por ahora, las relaciones están cortadas.