En la previa del choque por Copa Sudamericana entre Universidad de Chile e Independiente, el nombre de Leandro Fernández resuena fuerte en Avellaneda.
No es para menos: el delantero, hoy emblema de los azules, protagonizó una de las relaciones más intensas, y a ratos más conflictivas, con la hinchada del Rojo en los últimos años.
La intensa relación de Leandro Fernández con Independiente
Leandro Fernández llegó a Independiente el 12 de enero de 2016 desde Godoy Cruz y, apenas un mes después, ya estaba dejando huella. Su primer gol llegó en el Clásico de Avellaneda ante Racing, un 21 de febrero en un 1-1 que se recuerda por su picardía.
Sin embargo, esa temporada también tuvo un golpe duro: rotura de ligamentos cruzados frente a Belgrano, que lo dejó fuera por meses. Regresó a tiempo para sumarse al ciclo de Ariel Holan, con el que conquistó la Copa Sudamericana 2017.
En ese torneo Fernández tuvo su gran consagración. Le anotó a Atlético Tucumán en octavos y marcó un doblete a Nacional de Paraguay en cuartos, firmando cuatro goles en siete partidos y siendo parte clave de la última corona internacional del Rey de Copas.
Pero la historia no se escribió solo con celebraciones. En 2020, cuando su contrato terminaba, el club no logró acordar su renovación. Según la prensa trasandina, no era prioridad para el DT Lucas Pusineri y el alto salario que pidió fue un obstáculo.
Fernández partió libre, una salida que ya provocó controversia entre los hinchas por la forma en la que se produjo. Tras pasar por Inter de Porto Alegre y Nacional de Uruguay, volvió a Avellaneda en 2022 con un mensaje con el que buscaba cerrar heridas.
“Si alguno se sintió decepcionado, les quiero pedir perdón. Siempre tuve la mejor intención y un enorme cariño y respeto por esta hermosa institución. Ahora, es momento de seguir haciendo historia juntos. Vuelvo a casa, vuelvo al Rey de Copas”, escribió en una carta dirigida a los hinchas en su presentación.

La U provocó el último desencuentro de Leandro Fernández e Independiente
Su segunda etapa arrancó con fuerza: siete goles y tres asistencias en el último semestre de 2022, incluyendo festejos recordados como el beso al escudo y un tanto en un clásico donde recibió un pescado desde la tribuna de Racing. El romance con parte de la hinchada parecía renacer.
Sin embargo, en diciembre de ese año se repitió la historia. Independiente no pudo igualar una oferta que llegó y Fernández volvió a marcharse libre, esta vez a Universidad de Chile.
En redes sociales, el apodo “mercenario” empezó a aparecer con fuerza en respuestas y comentarios, reflejando una herida que nunca cerró del todo.
El contraste es claro: mientras un sector lo recuerda como campeón y figura de la Sudamericana 2017, la mayoría lo señala por dos salidas por la puerta de atrás del club.
Sus números con Independiente son indiscutibles: 97 partidos oficiales, 30 goles y 17 asistencias, además de la Sudamericana 2017 y la Suruga Bank 2018. Estadísticas que, para algunos, pesan más que cualquier polémica.
Ahora, con la camiseta de Universidad de Chile, Fernández volverá a verse las caras con el equipo que lo vio tocar el cielo. Un reencuentro que promete ser mucho más que un partido: será otro capítulo en la relación de amor y odio del 9 azul y el Rey de Copas.