
El mundo del tenis sigue conmocionado con el anuncio de un nuevo torneo Masters 1000 en Arabia Saudita, que no reemplazará a uno de los nueve ya existentes, sino que se sumará al calendario.
Con cada vez más injerencia en el deporte -es cosa de ver la reciente Six Kings Slam que reunió a los mejores jugadores del planeta- era cosa de tiempo para que los petrodólares se metieran de lleno en el tenis, pero ahora la gran pregunta es cuándo se disputará.
En un comienzo, la primera edición se disputaría 2028 (hay rumores que hablan que podría ser incluso antes), aunque todavía sin una fecha específica en el calendario.
Ahí aparecen dos opciones. La primera es que sea el primer torneo del año, disputado incluso antes de la gira por Oceanía previa al Australian Open. Esto supondría un complejo lío, considerando que debería comenzar en diciembre, incluso antes de Navidad y Año Nuevo.
Por eso el otro bloque es el que parece más factible: en febrero, después del Gran Slam australiano y antes de los Masters 1000 de Indian Wells y Miami, en Estados Unidos. Así se empalmaría con otros dos torneos que ya se juegan en Medio Oriente, Doha y Dubai, creando un pequeño bloque propio.
 Lee también“Sentí mucho miedo”: Zizou Bergs revela incómodo momento con hinchas chilenos tras agredir a Cristian Garin
Lee también“Sentí mucho miedo”: Zizou Bergs revela incómodo momento con hinchas chilenos tras agredir a Cristian GarinY ahí es donde saltan las alarmas en nuestro país, ya que esa es justo la parte del calendario en la que se disputa el ATP de Santiago. Aunque no se juega la misma semana, las chances de atraer a figuras internacionales, o incluso a los mejores jugadores nacionales, se complicaría todavía más, bajándole el perfil internacional.
Este Masters 1000 de Arabia Saudita no será “obligatorio”, es decir, los tenistas no estarán forzados a riesgo de perder puntos ATP, como sí ocurre con los otros de la misma categoría. Pero se da por descontado que el emirato pondrá una importante bolsa de dinero para enganchar a las principales figuras del circuito.
Eso golpea directamente a la gira por Sudamérica, que por el momento la componen tres torneos: Río de Janeiro, Buenos Aires y Santiago.

“Nuestra preferencia es que se juegue en febrero, pero es un mes muy concurrido, hay ciertas limitaciones. Necesitamos tiempo para estudiar cuál es la manera ideal de proceder”, señaló el extenista italiano Andrea Gaudenzi, presidente de la ATP.
Según él, la idea es hacer convivir a ambas giras, pero no cabe duda cuál será la más perjudicada de las dos, considerando el enorme poder económico de los árabes.
Incluso hubo rumores sobre que la Asociación “compraría” torneos, con dinero desde Medio Oriente, a fin de hacer desaparecerlos para generar más espacio en el calendario. Por ahora, según Gaudenzi, esa chance no está contemplada.
Pero claro, hasta hace unos años el tener un décimo Masters 1000 tampoco parecía plausible, y ahora está cerca de convertirse en una realidad.







