
Durante el lunes, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dictó un decreto que prohíbe a las compañías detrás de las redes sociales remover contenidos de forma "arbitraria".
Lo anterior responde a que se busca defender la "libertad de expresión de las redes sociales", surgiendo como respuesta ante la censura de perfiles o para enfrentar las denominadas fake news.
Justamente, sobre esto último, el presidente Bolsonaro ha sido protagonista de varias de estas, promoviendo dichos contenidos en redes sociales.
Tras el decreto, ahora se deberá analizar en un plazo de 60 días por parte del Congreso, aunque mientras no se pronuncie al respecto, ya entró en vigor.
Con respecto a lo que permite la medida, las empresas solo pueden remover, por ejemplo, contenidos si cuentan con una causa justa, ofreciendo primero un canal a quienes usen las redes sociales para que se puedan defender.
A juicio del Gobierno de Bolsonaro, la remoción de contenidos va en contra del debate público de ideas y el ejercicio de la ciudadanía, por lo que se genera "una violación en masa de derechos y garantías fundamentales", entre las que se cuenta la libertad de expresión.
La respuesta de las redes sociales
Por parte de las redes sociales, un portavoz de Facebook cuestionó el decreto, expresando que "esta medida provisoria limita de forma significativa la capacidad de contener abusos en nuestras plataformas".