El caso de Nano Calderón sumó un nuevo polémico capítulo. Esto, porque su polola, Rebeca Naranjo, desistió de la querella por presuntos abusos sexuales interpuesta contra Hernán Calderón Salinas.
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Sin embargo, durante esta jornada se revelaron varios audios que dejaron en evidencia la extorsión que sufrió el abogado, donde se le pedía que si no pedía prisión para su hijo, acusado de parricidio frustrado, bajaría la querella por abusos.
Pero un nuevo dato salió a la luz, ya que esa no fue la única presión que sufrió Calderón Salinas, pues se conoció de otra que no alcanzó a prosperar por razones similares.
Según señala BioBio, y de acuerdo a fuentes cercanas a Hernán Calderón padre, el fin de semana del 22 y 23 de agosto, luego de la formalización de Nano, recibió nuevas amenazas.
Estas provenían de la defensa contratada por Raquel Argandoña, y hablaban de la posibilidad de presentar una nueva querella por presuntos abusos sexuales contra una mujer de iniciales J.A.
Finalmente, esta acción no se concretó ya que se descubrió que la denunciante habría recibido una oferta para ocupar durante un año un departamento ubicado en la comuna de Las Condes, el que pertenece a la panelista de “Bienvenidos”.
