Hace unos días, se dio a conocer la triste información sobre que la fallecida Reina Isabel II padecía de una compleja enfermedad, antes de su muerte el pasado 8 de septiembre. La persona que entregó el antecedente fue Gyles Brandreth, el cual es el biógrafo de la familia de la Corona Británica. En su próximo libro "Elizabeth: Un retrato íntimo", cuenta que "había oído que la Reina tenía una forma de mieloma, cáncer de médula ósea, lo que explicaría su cansancio y pérdida de peso y esos problemas de movilidad de los que a menudo nos hablaron durante el último año de su vida". El anterior testimonio fue recogido por el diario inglés, The Mirror, el cual tuvo acceso a un extracto de la obra realizada por el escritor cercano a la familia real. Recordemos que la causa de muerte de la Reina Isabel II que fue entregada por la casa real fue que su deceso se produjo debido a su edad. Otro de los aspectos que se revelan en el libro es cómo enfrentó la difunta monarca el fallecimiento de su esposo, el príncipe Felipe de Edimburgo. Conforme a la obra, ella habría quedado destrozada, sin embargo, se mantuvo compuesta por el bien de la monarquía británica.