Nacho Gutiérrez vivió dos episodios históricos para Chile y el mundo durante su extensa estadía en "Buenos días a todos": el Estallido Social de 2019 y la llegada del Covid-19. Ya alejado de la televisión hace varios años, el periodista resume cómo fueron aquellas vivencias en el matinal de la señal estatal.
"En la pandemia se mezclaron dos cosas. Fue emocionalmente muy difícil y era laboralmente muy complicado también. Pasamos de un equipo de 60 personas, quedando ocho. En el canal no había nada, no tenía maquilladores ni peluqueros, nada, no había nadie. Íbamos al aire, pero no había pauta. Después me iba a la casa a encerrarme", recuerda el comunicador en medio de una distendida conversación con "#Relaja2", el nuevo programa de TiempoX.
El periodista no había dimensionado las consecuencias del coronavirus y la pésima manera de comunicar en aquel momento histórico, hasta que el Doctor Ugarte lo invitó a presenciar la Unidad Cuidados Intensivos de una reconocida clínica de la capital.
Al rememorar aquel episodio, Nacho Gutiérrez realiza un potente mea culpa: "Creo que los comunicadores nos equivocamos en un principio, y los medios en general, al hablar que sólo eran vulnerables los adultos mayores y personas con algún tipo de enfermedad crónica, le dimos mucho foco a eso. El Covid-19 se fue llevando a gente de 40 años, después a más chicos que yo".
Cada paciente que trató el profesional en aquel momento, lo vio reflejado en sus familiares y cercanos: "Vi a mi papá, a mi mamá, hermanos y sobrinos. Sentí que cualquiera de mi entorno podría estar ahí".
"Creo que fue súper decidor para cambiar la forma de comunicar... Menos mal fue al principio de la pandemia. A veces me preocupaba más de la cuenta, porque no estoy preparado para perder a mis papás. Todavía los necesito mucho", comenta Nacho Gutiérrez.