El matinal "Buenos Días a Todos" ha estado subiendo su rating y sus animadores Carola Escobar y Gonzalo Ramírez, han visto el fruto de un arduo trabajo de un equipo que por fin pudo salir del último lugar. Y es que mucho se debe a la química que existe entre ellos, que además realizaron un duro desafío que quisieron compartir. Ambos e conocieron el año 2013 para animar una edición de "24 Horas", "cuando estábamos haciendo el noticiero, el jefe de prensa de ese momento me dice que va a llegar una flaca, me pide que me junte con ella para decirle que me parece. Enganchamos súper bien, tenemos un humor parecido y estamos en la misma parada", mencionó Gonzalo a LUN. Por otro lado, Carola asegura que era muy cuadrada y que Gonzalo la ayudó a "desordenarse" en la pantalla, "mínimo dos veces al mes le decía a Gonzalo "nos van a echar, no puedes hacer eso", porque tirábamos la talla en el noticiero. Era muy santurrona, entonces él me fue preparando para chasconearme en pantalla", dijo. La cercanía no solo es mientras trabajan, ya que han establecido una fuerte amistad también fuera de la pantalla, "la hemos cultivado dentro del canal porque lo pasamos bien, intentamos que nuestro día laboral , que es largo, sea entretenido. Fuera del canal hemos tenido ricas oportunidades de juntarnos con nuestras parejas y familia. Es una fortuna hacer una pega que nos motive tanto y además sortear una bonita amistad", aseguró Ramírez. Los animadores tienen en común que a ambos les gusta hacer deporte y llevaban harto tiempo intentando coordinar subir juntos el cerro Manquehue en Vitacura. Entre los tiempos entre trabajo y vida personal, finalmente coincidieron este jueves por la tarde. Al iniciar el recorrido, Gonzalo comenta que es su sexta vez subiendo el Manquehue, "subir cerros fue un descubrimiento del 2020. La primera vez que llegué a la cumbre dije wow y me dieron ganas de volver a hacerlo". Así también Carola añadió: "Yo suelo subir el Cerro Del Medio en Lo Barnechea. El fin de semana pasado pedí dos permisos de dos horas para subir ese cerro los dos días en la mañana". Ramírez contó que tuvo un accidente cuando tenía 23 años, "me produjo un daño en la zona lumbar en el sacro, vértebra L5 y L4, que con los años terminó en un dolor insoportable. Me he operado dos veces e infiltrado", mencionó. Aún así, no flaqueó todo el trayecto, con rápidos reflejos ayudaba a su colega para saber donde pisar mientras subían. "Nunca dudé de mi. Soy muy buen soldado, se llega hasta el final muerta antes de frenar en algún momento. Igual tengo mojadita la espalda jajaja", aseguró Carola Escobar.