El mexicano Ángel Fierro, apodado “Tashiro”, peleaba contra Abraham Cordero. Una velada normal de boxeo en Tijuana, que en un segundo se volvió en una auténtica locura. ¿Qué ocurrió?
El primero de estos, en buen chileno, se picó y comenzó a atacar a su rival incluso cuando el juez ya les había ordenado separarse. Más encima, el árbitro también se llevó su “cariñito”. Eso si, lo más insólito fue la patada que tiró “Tashiro”, lo que obviamente lo llevó a ser descalificado de inmediato.
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