Luis Miguel Margas (17), jugador de la Sub 21 de Santiago Wanderers, es uno de los tantos jóvenes del fútbol formativo que están con la expectativa de seguir avanzando para empezar su carrera en un primer equipo.
El zaguero central, es hijo del exfutbolista, Javier Margas, campeón de la Copa Libertadores 1991 con Colo Colo y Mundialista de Francia 1998 con la Selección Chilena. “Estoy muy feliz de estar en esta hermosa institución, tengo mis metas claras, mi sueño es ser futbolista profesional”, expresó en conversación con Las Últimas Noticias.
El jugador se inició en Colo Colo a los nueve años, pero no continuó por los traslados: “Era muy sacrificado porque como vivimos en Viña, viajábamos tres a cuatro veces a la semana a Santiago con mis papás. Salía del colegio a los dos de la tarde, a las cuatro y media entrenaba en el Monumental y a los ocho estábamos de vuelta en Viña”.
“Los domingos cuando jugábamos salíamos a las cinco de la madrugada para llegar a las siete. Eso me separó del colegio desde muy chico (...) A los 12 años me probé en Wanderers y quedé. Estuve un año y me salí porque había quedado cabreado de tanto viaje. Eso fue como en la Sub 14, luego vino la pandemia y el 2021 volvimos a entrenar”, añadió.
El joven tiene claros sus objetivos en el cuadro “Caturro”: “Hasta el momento, cumplir mis primeras metas de este año, afirmarme en la categoría, que no es menor con tres años de diferencia y agarrar minutaje, John Valladares es mi DT”.
Margas Jr en tono de broma aseguró que su padre no le trae buena suerte: “El año pasado me fue a ver dos veces, en una me expulsaron y en la otra me fracturé, así que es un poco yeta. Le digo ‘no me vayas a ver más jajaja’, tenemos una muy buena relación, no sabría como expresarlo de otra forma”.
El ex West Ham aseguró que a veces siente temor por su hijo, porque vio a los jugadores que no llegaban al profesionalismo, además ve diferencias en la preparación: “Él es muy agresivo, es un verdadero atleta, es como un caballo ingles, pura fibra, buena alimentación, ve partidos todos el día, está preparado con otra mentalidad, no como uno. Yo le digo que disfrute, que no se frustre si no llega, pero él está bien enfocado. Con 17 está en la Sub 21, ya están dando un combo más adelantado”.
En tanto, el juvenil tiene claro lo que logró su papá: “Yo sé quien fue, él siempre dijo que nunca fue el mejor, pero que todo esfuerzo trae su recompensa. Fue campeón de América, jugó un Mundial, hizo una tremenda carrera, llegó a Inglaterra. Vi sus videos, era un central rústico jajaja, hoy el fútbol es muy distinto, pero en esos años se jugaba así, era un guerrero”.
Por último, se refirió a la figura de Nicolás Peñailillo, jugador de Unión La Calera: “Mi cuñado también juega futbol y siempre me ha inculcado eso de cuidarme con las comidas, las proteínas, me ha apoyado mucho”.