El partido entre Deportes Antofagasta y Palestino, correspondiente a la Segunda Fecha del Campeonato Nacional Femenino de Primera División, comenzó alrededor de una hora más tarde de lo originalmente programado por una razón bochornosa: al igual que lo ocurrido más temprano en el Fernández Vial vs O’Higgins, no había una ambulancia en el recinto.

A diferencia del duelo en el Biobío, eso sí, el encuentro sí arrancó, pero debido a una decisión no exenta de polémica. Al no contar con un vehículo médico en el Estadio Ascanio Cortés de Tocopilla, escenario del partido, los encargados del equipo local propusieron la utilización de una camioneta de Bomberos como alternativa.

Se enviaron las fotografías a la ANFP para que en Competiciones decidieran si es que se aceptaba el nuevo medio de transporte o no. Luego de unos 45 minutos de espera, en los que el árbitro del encuentro, Sergio Barahona, comentó a los presentes que el comienzo del duelo pasaba por la decisión que se adoptara desde Quilín, el partido arrancó.

La determinación de la ANFP vulnera claramente las bases del torneo, que en su artículo 49 estipulan que “Será obligación del Club local disponer, para cada partido, de una ambulancia, una camilla y al menos dos camillero mayores de edad... Si la ambulancia no estuviera presente, el árbitro no podrá dar inicio al partido. Luego de un tiempo máximo de 15 minutos de espera, deberá suspender el encuentro y se dará por ganador al Club visitante por un marcador de 3x0″.

FOTO | La “ambulancia” que la ANFP autorizó para que se jugara el partido entre Deportes Antofagasta y Palestino

Al cierre de esta publicación, la ANFP no respondió a las consultas de En Cancha por el tema.