“Siempre es lindo recordar buenos momentos y viví muchos jugando por Cobreloa”, dice Nicolás Trecco ante de cortar tras una extensa conversación con En Cancha para repasar su paso por el fútbol chileno y el equipo que le permitió hacerse un nombre en el país.
La conversación, lejos de ser antojadiza, se centra en el color naranja, todo ad portas de un reencuentro que dará que hablar pues Cobreloa visitará a Colo Colo en su retorno a la división de honor.
Será el lunes 11 de abril a las 20:30 horas cuando la espera de los loínos termine, pues tras 8 años fuera de Primera, retornó y se prepara para el anticipado reencuentro con su archirrival.
El recuerdo de Nicolás Trecco sobre el último triunfo loíno en Pedrero
Sobre cómo vivió aquel momento y las expectativas con el retorno de los calameños, fue que el delantero, hoy en Atlético Villegas de Argentina, se explayó sin esconder sus ganas de que la suerte se incline a su favor. Y obvio, su día de gloria en los Naranjas, cuando marcó uno de los goles en el triunfo sobre Colo Colo en las semifinales del Clausura 2011, eliminando a los albos en su casa... el último triunfo loíno en el Monumental hasta la fecha.
- ¿Qué sentiste cuando Cobreloa consiguió su retorno a Primera División?
Felicidad, me puso muy contento. Para el fútbol chileno está muy bueno que Cobreloa esté en Primera por todo lo que conlleva. Por sus títulos, hinchada y estadio. Le costó varios años como le cuesta a otros equipos también, así que es una gran noticia.
- Algo que viene por añadidura es el enfrentamiento con Colo Colo...
Es así. Enfrentar a Colo Colo motiva a todos y la gente en Calama siempre quiere ganar ese partido y te lo hace notar. Por eso para nosotros en ese momento dejarlo sin una final contra la U fue muy importante.
- ¿Cómo llegaban en esa semifinal del Clausura 2011?
Era una llave compleja porque ellos tenían un gran equipo pero nosotros también teníamos nuestras armas. Recuerdo que el estadio estaba lleno y partimos perdiendo, pero teníamos una convicción importante sobre lo que queríamos lograr. Ellos tenían un gran equipo pero nosotros fuimos con nuestras armas, además del apoyo de don Nelson (Acosta).
- Que hoy está muy complicado de salud...
He sabido de su actualidad por su familia. El Alzheimer es bastante cruel porque vas empeorando y no se puede hacer nada, donde pueda le escribo a la familia. Lo quiero mucho por todo lo que me ha enseñado, siempre fue un libro abierto. Trate de aprovechar lo que más pude.
En la última década, Colo Colo y Cobreloa dejaron de ser las fuerzas parejas de antaño. ¿Puede pesar el ser un equipo recién ascendido?
Yo creo que no hay que olvidarse de lo que uno representa porque la naranja también es una camiseta pesada y ya con mirarte el escudo la motivación tiene que salir sola. Esa intensidad no puede transformarse en que te coman los nervios. Seguramente el técnico tiene un plan a ejecutar y ojalá se dé como lo está pensando Cobreloa.
- ¿Sigue ahí la espinita de volver al club en algún momento?
A mi me encantaría. Yo estoy bien, en forma y trabajando duro, pero sé que no es fácil (actualmente está en una liga regional, aspirando a un cupo en el Federal A de Argentina). Si no se da, quizá tratar de volver ya sea como técnico o colaborador.
-¿Con el curso ya hecho?
Ya hice la carrera de entrenador y la verdad que sí, me gustaría. Todo tiene su preparación y la vida es dinámica porque no sabemos que va a pasar. Todavía no pienso en dejar el fútbol pero es un camino que me gusta para el día en que deje esta actividad y, por qué no, hacerlo en Chile.