Apenas ocho partidos. Eso es lo que le resta a Unión Española para intentar salvarse del descenso, una vez que finalice el Campeonato Nacional de Primera División 2025. Un panorama extremadamente delicado para los Hispanos, que desde el primer torneo profesional jugado en Chile, en 1933, solo en una ocasión perdieron la categoría (1997).
En Santa Laura están conscientes de que una caída a la B sería un golpe catastrófico. De allí es difícil volver (que lo digan Cobreloa, Wanderers) y es imposible prever cómo sería la realidad institucional del club si es que se concreta el desastre. Pero quedan esos ocho partidos para pensar en la permanencia. 24 puntos en juego, para marcar la diferencia final entre la salvación y el averno…
El partido en Chillán, ¿punto de inflexión?
Hubo signos de recuperación en la última fecha de la Liga de Primera, cuando en un partido épico, el equipo dirigido por Miguel Ramírez le ganó a Ñublense en Chillán. Un duelo fundamental y que fue seguido muy de cerca por un verdadero ídolo del club. El ex zaguero Jorge Ampuero, quien defendió la camiseta hispana por 11 años y fue campeón de Primera y de la Supercopa en Independencia, habló en exclusiva con En Cancha, para analizar la actualidad del equipo del cual es hincha y al que llegó cuando apenas tenía 13 años de edad.
Retirado del fútbol profesional hace tres años (su último club fue Rodelindo Román), el ex capitán rojo cuenta cómo vivió el duelo ante los chillanejos: “Me encantó el partido que vi con Ñublense, pero más allá de un tema técnico táctico, para mí fue el amor propio que tienen los jugadores y el respeto hacia el club. Me provocó mucha admiración el partido que hicieron, porque no era fácil: un expulsado a los pocos minutos, aguantar así y con todo en contra. Estábamos jugando contra todos.

-Pero ese amor propio y esa garra fue lo que se mostró en el último partido. ¿Qué pasó el resto del año?
El tema es que el club estuvo mal trabajado en el aspecto dirigencial y, para mí, el gran responsable de la situación en que hoy está Unión Española es Cristián Rodríguez (ex gerente general).
-¿Por?
Gestionó muy mal las cosas. Aparte del cariño que le tengo al Coto Sierra, sé que es un gran técnico, pero pidió jugadores y Rodríguez le trajo la opción C para cada puesto. Y, lamentablemente, el jugador que el Coto sí quería en delantera, (Matías) Suárez, con excelente currículum, llegó lesionado. Pero las contrataciones tienen culpable…
-¿Qué cambió tanto en Unión Española en este año, que pasó de ser protagonista, de jugar copas internacionales, a pelear el descenso? Lo del mismo Coto, que tú fuiste campeón con él y ahora no funcionó…
Acá hubo algo clave, con una persona que se fue del club. Yo con (el ex gerente general) Johnny Ashwell siempre peleamos por todo; por defender a mis compañeros, a los hinchas cuando nos cambiaban los partidos a última hora; siempre peleamos. Pero, al final, quien mejor administró el club fue él. En los años en que Unión estuvo peleando copas internacionales o el torneo, estuvo metido él. Con todos los defectos y otras cosas positivas, administró muy bien el club.
-¿En qué se notaba eso?
Trajo muy buenos jugadores, tenía un respaldo de que no venían refuerzos por solo una temporada, sino que hacía contratos a mediano y largo plazo a jugadores claves. Al final, eso marcó la diferencia. En mi tiempo, Gonzalo Villagra llevaba mucho tiempo en el club, nuestro cabecilla, luego llegó Diego Scotti, también Braulio Leal. Después trabajaron a los más chicos que veníamos en ese minuto, que nos fuimos moldeando. Hoy no: hay jugadores que vienen por un año y, les vaya bien o mal, da lo mismo. Los mismos jugadores de casa; con dos o tres partidos, ya se quieren ir del club. Todo eso echó a perder a Unión Española.
-¿Y que Jorge Segovia esté en el extranjero? ¿Se estará tal vez agotando la fórmula del presidente ausente?
Yo viví mucho tiempo la interna de Unión y Don Jorge siempre estuvo fuera de Chile. Cuando recién tomaron el club, se hacía presente, pero después se fue y la administración la hacían distintas personas. El gran pilar es quien se queda encargado de la gestión deportiva del club. Hoy asumió Sabino Aguad, que es alguien de fútbol, esperemos que lo haga bien; como hincha, le deseo lo mejor. Aunque don Jorge esté fuera de Chile, si la persona que se queda sabe de fútbol, va a construir bien un equipo.

“Miguel Ramírez es un buen técnico, pero quizás no sea el DT para Unión”
Ampuero confía en que Unión se salva. Quizás más empujado por el deseo del hincha que por otra cosa, pero el ex zaguero central guarda el anhelo de que en 2026 Unión Española siga en Primera.
-¿Por dónde pasa la salvación de aquí al final del torneo?
Por el amor propio de los jugadores, no hay otra cosa. Miguel Ramírez es un buen técnico, lo tuve como profe, y trabaja bastante bien, pero quizás no sea el técnico para Unión. Sí espero que le vaya bien, pero la salvación pasa por los jugadores, por su amor a esta profesión, que no quieran manchar sus hojas de vida con un descenso.
-A ver, ¿Ramírez no es un técnico para Unión?
Mira, Unión tiene un estadio maravilloso para ver fútbol. Creo que necesitamos a un Ronald Fuentes, que hace un trabajo de tenencia de balón; me gusta mucho ese estilo de juego, esa escuela. La del Coto, la de Luis Hernán Carvallo, Fernando Carvallo. Ir a ver a fútbol a Santa Laura, con buenos jugadores, buena tenencia, eso es lo que tiene que llevar Unión es su emblema futbolístico.
-¡Ah! Entonces, es un tema de gustos. No estás diciendo si es bueno o malo…
Exacto. Por eso digo que Miguel es un buen técnico, pero no de mi escuela…
-¿Quiénes son los llamados a tirar el carro de Unión Española para salvarse del descenso?
Pablo Aránguiz es el líder innato que tiene que tener Unión. He hablado con él en estos días para saber cómo está porque es un pilar fundamental para los partidos que van quedando. El jugador clave, sin dudas, pero tienen que sumarse a él los más grandes. Deben asumir la responsabilidad de levantar a los más chicos para luchar por salir del descenso.

-¿Qué te pareció el mercado de fichajes de Unión Española a mitad de año?
Dentro de las posibilidades que había, llegaron buenos jugadores. Pero, de todas maneras, creo que pena el Pulpo (Diego) González. El año pasado fue clave y yo me hubiera jugado un poquito más de opciones para haberlo traído. Además, conoce al club, así que habría sido un pilar fundamental para pelear en esta situación.
-¿Y Vecchio?
El Gordo es extraordinario, no hay otra palabra para describirlo. Pero, por temas de liderazgo en el grupo, para mí era el Pulpo…
-Ahora viene Audax; partido fundamental…
Es clave. Tal como el partido pasado lo ganaron los jugadores, con puro amor propio, ahora será lo mismo. Audax es durísimo, con muy buenos jugadores y peleando en la parte alta de la tabla. Los jugadores lo van a sacar adelante.