Rafael Dudamel ha conseguido a cada uno de los hombres que pidió en el presente mercado de transferencias del Campeonato Nacional. Sin embargo, los principales perjudicados con el arribo de refuerzos a la U serán los juveniles azules, quienes han sido desplazados constantemente por los diferentes cuerpos técnicos que han pasado por el club.
El caso más dramático es el de Simón Contreras, quien tuvo un extraordinario desempeño en la recta final del torneo y se afianzó como uno de los jugadores claves en el repunte de Universidad de Chile. No obstante, la dirigencia de la institución está por confirmar el arribo de dos mediapuntas por derecha para pelear el puesto: Thomas Rodríguez y Nahuel Luján.
De esta forma, una de las máximas promesas de la U tendría que volver a ser alternativa para el director técnico venezolano o reconvertirse en extremo por izquierda, donde lucharía por una posibilidad en el equipo titular contra el talentoso Pablo Aránguiz y el recuperado Franco Lobos, otro formado en casa.
Otro que podría ser perjudicado con el arribo de nuevos elementos es el mediocampista de contención Camilo Moya. Si bien ha gozado de buenas campañas en su estadía en el "Romántico Viajero", la directiva del club estaría evaluando la posibilidad de traer a Claudio Sepúlveda (Huachipato) o Tomás Alarcón (O'Higgins).
El arribo de alguno de ellos permitiría que "Moyita" sea desplazado a papeles secundarios en las alineaciones de Rafael Dudamel de cara a la próxima edición del Campeonato Nacional. Asimismo, esta situación lapidaría su ostensible crecimiento que ha tenido en las últimas temporadas que ha permanecido en la U.
Además, otro afectado sería el volante juvenil Mauricio Morales, quien dejó buenas impresiones en los 4 encuentros que disputó en el pasado torneo, sin embargo, no tuvo la confianza del venezolano en la recta final y fue marginado constantemente de las citaciones.