Universidad de Chile no vive un agradable momento como institución, independiente de su situación en el Campeonato Nacional. La integración de Mauricio Etcheverry a Azul Azul conllevó a grandes diferencias al interior de la concesionaria: un sector no tolero el ingreso de la mano derecha de Sergio Jadue. La razón de dicho movimiento, por lo bajo, es curiosa.
Según informó radio Cooperativa, dentro de la firma que administra a la U se consideró que las constantes negativas que recibió el club para ejercer su localía a lo largo de Chile llegaron a un punto crítico. Ante esto, necesitaban un personaje con conexiones dentro del rubro, por lo que Etcheverry calzaba perfectamente por su labor en la ANFP y con La Roja.
A su vez, desde Azul Azul creen que en la entidad organizadora del fútbol chileno aún quedan vestigios de la era Jadue, por lo que el perfil del inversor de Unión Compañías de Tercera División calza perfecto con el cargo. Sin embargo, el ingreso de Etcheverry fue la gota que rebalsó el vaso en la U.
La polémica del ingreso de Etcheverry a la U
Al momento de conocerse la llegada de Etcheverry a Azul Azul, no solamente los hinchas reaccionaron de mala manera en redes sociales, sino que al interior de la concesionaria también hubo un gran descontento por parte del directorio. Una de las principales detractoras fue Carolina Coppo, que en conversación con Cooperativa rechazó el ingreso del personaje ligado a la era Jadue.
"Tenemos visiones absolutamente distintas tanto en la vida como en lo que significa hacer club, y eso obviamente genera conflictos y problemas, y también diferencias de opinión en relación a las decisiones que hay que tomar" detalló. Dentro de la firma, fue una de las que pidió revocar la decisión del ingreso de Etcheverry, exigiendo que dichas decisiones fueran consultadas.
No obstante, habrá que analizar la capacidad de dicho nombre para conseguir estadio para la U. Antes de su llegada, desde Azul Azul ya habían concretado la opción de Valparaíso para el duelo de vuelta de octavos de Copa Chile ante Cobresal, pero habrá que determinar si los azules continuarán jugando en el Estadio Nacional tras el Clásico Universitario contra la UC, lo que podría ser la prueba de fuego para Etcheverry.