El Monte Everest, la cima más alta del mundo, ha atraído la imaginación del ser humano desde tiempos remotos. Sin embargo, son pocos los que han podido conquistarlo y, por lo general, el enorme esfuerzo físico que requiere impide poder apreciar toda su magnitud. Pero un registro del montañista Ben Jones, grabado en 2018 pero que recién sale a la luz, permite ver cómo es la vista desde sus 8.848 metros de altura en un día despejado.