Una nueva final se jugó este domingo en el fútbol inglés, y el ganador fue Liverpool, porque venció por 1-0 a Chelsea en Wembley, por la tradicional EFL Cup.
La figura de la jornada en Londres fue el neerlandés Virgil van Dijk, quien marcó el único tanto del partido, in extremis, porque marcó con un hermoso golpe de cabeza a los 118 minutos, dos antes de que se fueran a la definición por penales.