La pizza es una de las preparaciones más populares en todo el mundo, con cientos de variedades para degustar y compartir con nuestros seres queridos, ya sea durante la once, como una cena o incluso como almuerzo.
Y si ya se te antojó tanto como a nosotros, te dejamos a continuación un receta fácil para preparar este clásico de la gastronomía italiana en casa, de forma simple y rápida.

Receta de pizza casera
Ingredientes:
Para la masa:
- 250 gramos de harina sin polvos de hornear.
- 3/4 de cucharadita o 4 gramos de levadura seca.
- 1/4 de cucharadita de azúcar
- 100 ml de agua tibia
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva
Para los toppings:
- 1 salsa de tomate de 200 gramos
- 1 tomate en rebanadas
- 1 taza de queso granulado
- Orégano al gusto
- Verduras, embutidos y carnes al gusto (opcional)
Preparación:
- Mezclamos la levadura con el agua tibia y el azúcar, y dejamos reposar por 10 minutos.
- Cernimos la harina con un colador y le añadimos la sal por alrededor del contenido. Hacemos un hoyo al medio y echamos la levadura, cuidando de que no toque la sal directamente.
- Revolvemos bien hasta que la mezcla quede integrada y comience a formar la masa, ya sea con una cuchara o con las manos, empezando a amasar suavemente.
- Añadimos la cucharada de aceite de oliva a la masa y seguimos amasando con cuidado.
- Enharinamos una superficie plana, como un mesón, y la amasamos por un par de minutos. Cuando ya esté formada y suave, la hacemos bolita, la ponemos en un recipiente y le ponemos un poco de aceite de oliva por encima.
- Tapamos con papel aluza y un paño de cocina encima antes de dejarla reposar por una hora en un lugar cálido.
- Una vez pasado ese tiempo, la sacamos del recipiente, la amasamos un poco con fuerza o dándole golpecitos suaves para que la masa se airee.
- Extendemos la masa y la colocamos como una lámina delgada en un molde o lata apta para el horno, asegurándonos que el borde sea un poco más grueso que el resto.
- Le añadimos la salsa de tomate y la esparcimos con una espátula o cuchara por toda la superficie.
- Agregamos el queso, el orégano, y todos los toppings que quieras. Algunas opciones comunes son jamón, choclo, cebolla, aceitunas, champiñones, salame o pepperoni, pimentones... la clave está en jugar con tu imaginación.
- Ponemos la pizza al horno precalentado a 200° por cerca de 25 minutos, hasta que veamos que la masa está dorada ¡Y listo!