[ Por Marcelo Gómez (@cojeli)Opens in new window ]
Me encantaría que los triunfos como el de ayer tengan un valor distinto al de ser “vitales en la lucha por la permanencia”, como ha sido la tónica en todos los campeonatos en los que el club ha estado en Primera División desde hace veinte años. Es decir,
como Club de Deportes Antofagasta hemos sido malos dentro de los mediocres en este alicaído torneo nacional.
Desearía que el 5-0 no fuera un oasis dentro de los eternos malos comienzos de campeonato, que nos quitan de inmediato alguna opción cierta de pelear por algún cupo de copas, las cuales hoy la Conmebol nos los entrega casi al mejor postor:
Actualmente el 50% de los equipos participantes del Scotiabank tienen acceso a un torneo internaciona
l, y si miramos la tabla acumulada, entre el sexto y el decimosexto lugar sólo hay 5 puntos de diferencia.
Tan cerca desde las estadísticas, tan lejos desde la realidad.
Me gustaría que nuestro equipo jugara en una cancha digna, bonita y verde, y no en el sembradero de papas que era el C&B, porque como antofagastino entiendo que no existe otra institución que dé más representatividad a la ciudad que el CDA
. Y por lo tanto, es un deber esencial cuidar de nuestra casa, especialmente después de ser utilizada por actividades propias del pan y circo del que tanto gustan nuestras autoridades comunales. Que más quisiera yo que el hecho de tener seis jugadores formados en inferiores (cinco en cancha más Cabrera en la banca) fuera una política real como club, y no la urgencia de la contingencia. Esa donde
año a año el plantel se arma a una semana de la primera fecha, por la desidia absoluta del dueño del club por apostar a algo grande, por lo miserable de sus propuestas económico-deportivas, y por los chanchullos ya recontra conocidos en los fichajes de cuatro enjuague que llegan desde el Río de la Plata.
Lindo sería también que goleadas como esta no sean vistas sólo por 1.100 personas, si no que por un estadio que se acerque a su capacidad completa. Pero
es de conocimiento público que si hay algo que aborrece esta dirigencia es la gente en el estadio; estadio que han sido capaz querer cerrar en partidos oficiales para no pagar guardias, donde han aceptado jugar a mediodía en un calor infernal con tal de no pagar iluminación, donde la excusa permanente es que tienen la Galería a $5.000, cuando nuestra galería no ocupa más allá del 15% del estadio,
donde han decidido incluso dejar un solo control de acceso a las tribunas con todo el riesgo de seguridad, colas, retraso y fastidio para el hincha que ello implica. En definitiva,
que ganas que lo de ayer sea un buen día más en el club grande que queremos que sea el CDA y no una extraña y esporádica alegría
que nos entrega el equipo callampa que hemos sido en las últimas décadas. Por último,
darle las gracias a la U de Conce porque nuevamente con una goleada de local nos benefician.
Si hace dos años fueron ellos quienes nos boletearon en el C&B, dándole fin a la era del peor entrenador que vi en el CDA como José Cantillana, ayer fueron la victima que nos da un balón de oxígeno indispensable para seguir con opciones ciertas de mantenerse en Primera.