Días tormentosos se viven en la UC, luego que se conociera la mala relación que mantiene el cuerpo técnico de Gustavo Poyet con el plantel, lo que ha derivado en algunos altercados entre Diego Poyet y algunos referentes del equipo como Edson Puch y Fernando Zampedri.
Hoy el técnico uruguayo sacó la voz en San Carlos de Apoquindo. El cuestionado entrenador señaló que están enfocados netamente en lo futbolístico, donde deberán hacerle frente a La Serena en San Carlos de Apoquindo, de paso descartó la posibilidad de renunciar al cargo, debido a los últimos resultados y las críticas de los hinchas.
"No se me ha pasado por la cabeza renunciar. Como los objetivos que me han pedido se han ido logrando, estoy sumamente tranquilo. Evidentemente me gustaría tener más consistencia. Al momento que firmo por un equipo, mi vida pasa por mi familia, mis amigos y el equipo, y defiendo eso a muerte. En algunos lugares me resultó y en otros no, pero soy el que más hincha por el equipo, el que está más metido, porque sé que puedo perder mi trabajo", dijo.
Los líos con Diego Poyet
El plantel ha debido sortear más de un dolor de cabeza con Diego Poyet, hijo de Gustavo, que ya tiene un negro historial de polémicas en la Universidad Católica, desde expulsiones sin sentido hasta encontrones con jugadores del plantel en las prácticas del tricampeón.
"Diego no estaba suspendido. Por un tema de mirarlo desde arriba él decidió verlo desde la tribuna. Obviamente no quedó para nada lindo que saltara la valla, pero no fue en búsqueda de ningún problema. No discutió con nadie ni hizo nada malo. Después lo mandé para arriba de nuevo", explicó.
Respecto al altercado con el iquiqueño agregó: "Lo que pasa adentro del club no lo comento. No va con mi forma de ser. Tengo códigos que los aprendí de muy chico en Uruguay. Jamás conté nada de lo que pasó dentro de un vestuario".
