U. De Chile

El intenso trabajo físico de Dudamel ya cobró sus primeras "víctimas" en la U

En su primera semana completa al mando, el DT venezolano cambió completamente la forma en que el plantel entrenaba... y ya hay un par de caídos.

Tras su accidentada llegada a la banca de la U, este fue recién la primera semana completa de trabajo que tuvo Rafael Dudamel al mando del equipo. Y se notó de inmediato. No tanto en su publicitado estricto estilo de imponer disciplina y dictar normas de comportamiento, sino que desde el punto de vista físico.

De hecho, tras el día libre que le dio al plantel el lunes -tras volver de madrugada desde Viña luego del partido con Everton- el martes tuvo como mayor novedad la aparición del preparador físico del venezolano, Joseph Cañas, el último miembro de su cuerpo técnico que pudo viajar a Chile.

El PF de inmediato hizo sentir el régimen del nuevo estilo. Prácticas sumamente intensas, de dos horas mínimo por día y que en el CDA han descrito más como los que se suelen ver más en pretemporadas que en medio de un torneo.

Y ya hubo dos "víctimas": Walter Montillo, quien mientras sigue viendo sus chances de seguir en la U el próximo año, tuvo que hacer trabajos diferencias en las últimas jornadas, y Jean Beausejour, quien sintió molestias el viernes y podría haber sufrido un desgarro, aunque este lunes se le harán nuevas evaluaciones.

"Intensidad" total

No es por hacer comparaciones, pero la diferencia con los trabajos en la era Caputto han sido evidentes. Y si algo se le criticaba a su equipo era la baja de intensidad en los segundos tiempos, eso es algo que Dudamel ya tenía diagnosticado desde antes de asumir, y que de la mano de Cañas -con quien viene trabajando desde la selección venezolana- quiere corregir de inmediato.

El estilo de juego "intenso" que anunció en su presentación oficial, necesita jugadores finos en lo físico que aguanten el ritmo los 90 minutos.

En parte, eso es lo que ha provocado el conflicto por la renovación de Montillo, ya que si bien Dudamel no es que le haya bajado el pulgar, pero sí sabe que no todos en el plantel podrán adaptarse a lo que quiere imponer en la U.

Y veteranos como el volante argentino o Beausejour así lo han atestiguado, mientras que algunos de los más jóvenes, como el refuerzo uruguayo de 20 años Cristián Barros, se han lucido en estos primeros días y ganan bonos para ser titulares en el próximo partido, el Clásico Universitario ante Católica.

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