Universidad de Chile tiene prácticamente cerrada la llegada de Diego López a la banca. Con esto, el cuadro laico busca zafar del mal momento en el Campeonato Nacional y así dejar atrás los fantasmas de Primera B, aunque tendrá que una gran exigencia del DT charrúa: tener un rol protagónico en el armado del plantel para la segunda rueda.
Luego de que se conociera que el entrenador no querría contar con la figura de Jeisson Vargas como armador principal del equipo, la petición de López se extendió: quiere ser partícipe de la confección de la plantilla y contar con figuras con pasado en sus escuadras para el segundo semestre en Universidad de Chile.
Cabe destacar que el otrora DT campeón con Peñarol ya se sentó a conversar con Azul Azul para el segundo semestre del Campeonato Nacional. Para López, las grandes falencias de la U están en el lateral izquierdo, en la ausencia de un defensor central de categoría y, tal como se mencionó, en la carente figura de un volante ofensivo.
A falta de la firma, López ya pone sus condiciones para salir de la larga ausencia de la actividad como entrenador profesional, la que mantuvo desde 2020 en Brescia. Precisamente, en dicho club de la Serie A compartió con los italianos Michele Fini y Francesco Bertini, su asistente y preparador físico, respectivamente, que lo acompañarán en Universidad de Chile.
A la espera de lo que puedan ser las novedades de la inminente firma de Diego López en la U, el plantel dirigido por Sebastián Miranda se focaliza en lo que será su escollo por la decimocuarta fecha del Campeonato Nacional ante Huachipato. Dicho compromiso ante el equipo de Talcahuano se dará este sábado 21 de mayo a las 17:30 horas en el estadio Santa Laura.