Esteban Salinas, jugador del BM Granollers de la Liga Asobal y de la Selección Chilena de balonmano que está disputando el Campeonato Mundial de la disciplina en Egipto, es una de las figuras del combinado chileno que lleva seis participaciones al hilo en la máxima cita planetaria. Si bien cayeron por 34-29 ante los locales en su estreno oficial, el pivote se despachó 9 anotaciones en el partido y asegura que irán en busca de la clasificación en los próximos duelos. En una entrevista con EnCancha, el balonmanista detalló la estricta burbuja sanitaria a la cual están sometidos en El Cairo y, además, proyectó los duelos ante la poderosa Suecia este sábado y Macedonia del Norte el martes, los otros equipos que componen el Grupo G del campeonato. "Nosotros vamos con la ilusión de hacer un buen partido y de luchar hasta donde podamos. Tenemos que seguir lo que dice (el DT) Mateo Garralda, nuestro entrenador, quien nos motiva a seguir las directrices y ser disciplinado. Eso es lo que nos va a dar un triunfo", asegura Salinas en relación al complicado duelo frente a los suecos, quienes han levantado el Campeonato Mundial de Handball en cuatro oportunidades (1954, 1958, 1990 y 1999). Pese a que la competencia comenzó hoy miércoles, hace tan sólo dos días arribaron a El Cairo y, rápidamente, tuvieron que preparar el partido inaugural ante Egipto. ¿Cómo estuvo ese "caos" previo a la llegada? En la llegada al hotel estuvo todo bien. Un poco largo, más que nada. Como teníamos que hacernos PCR, llegamos a las 2 de la mañana. Después más PCR, más revisión y, si no me equivoco, nos hicimos otro test al bajarnos del avión, entonces fue mucho tiempo esperando. Nos acostamos a las 5 de la mañana el día que llegamos. Son todos temas de seguridad por el Covid-19, así que tenemos que acatar. Ya más tranquilos, ¿qué tal las sensaciones en el hotel? Las instalaciones son de lujo y la comida es impecable. Todo bien, incluso la hora de ir a entrenar y el autobús que nos disponen. La organización ha sido fabulosa. Acabamos de terminar el partido, nos hicieron un PCR preventivo y después nos fuimos a comer. Cada dos días nos hacen testeos, así que estamos impecables en el tema de seguridad. República Checa, con quien precisamente compartían grupo hasta hace unos días, se bajó de la competencia por casos positivos y Brasil anunció 5 en la jornada del martes. ¿Cómo viven ustedes el tema de un posible contagio allá? Con respeto. Siguiendo las reglas que nos dicen desde la organización, obviamente manteniendo la distancia de seguridad cuando estamos fuera del hotel. Sin embargo, siempre estamos dentro de una burbuja, la gente que entra al hotel está con PCR en regla. Hasta el conductor del bus y la gente de la organización tiene que tenerlo al día igual que nosotros. Esta tarde fueron partícipes del partido inaugural del Mundial ante la selección local. ¿Cómo se vivió la derrota en la cancha? El primer tiempo estuvimos bastante erráticos en ataque, ya que no hubo circulación de balón. No aprovechamos nuestras virtudes, nuestra velocidad y nuestros desmarques por delante de la defensa rival. Ellos estaban muy cómodos. Al principio del primer tiempo, pudimos encontrar al pivote, en este caso yo, pero después los egipcios se cerraron. Ahí deberíamos haber lanzado más de afuera, justo en el momento que se estaban cerrando, sin embargo pecamos un poco porque nos pillaron mucho de contraataque y eso marca la diferencia. Eso sí, en la otra mitad se vio un equipo distinto y estuvieron a tres anotaciones de igualar el partido. En la segunda parte ajustamos todo. En el camarín lo hablamos y teníamos las cosas claras. Más encima estaban haciendo todo lo que habíamos visto en videos anteriores, ya que los habíamos estudiado muy bien. Además, en el segundo tiempo nos soltamos más, el juego fue mucho más fluido y se vio reflejado en el resultado final. ¿Con qué sensación se quedó La Roja después del cotejo? Egipto es una selección muy competitiva, con grandes jugadores a nivel mundial y no podemos perdonar todo el primer tiempo. Nos vamos con una satisfacción de que hicimos un buen balonmano y sabemos que si estamos concentrados podemos competirle a cualquiera. Pese a la estrecha derrota, todavía quedan dos duelos trascendentales para jugarse la chance de clasificar a la segunda fase. Nosotros teníamos todas fichas puestas de que podíamos quitarle los dos puntos a Egipto. Teníamos que hacer un buen partido, obviamente. El 16 de enero nos toca con Suecia, el cual será partido muy difícil con una selección top a nivel mundial. Prácticamente todas las selecciones de nuestro grupo lo son. Los suecos tienen un equipo muy bueno, con grandes jugadores que disputan la Champions League (máxima competición europea de balonmano a nivel de clubes). Después les toca Macedonia del Norte, con quienes, precisamente, se prepararon en los duelos preparativos al Mundial. ¿Este es el "partido bisagra" para clasificar a la siguiente fase? El partido contra Macedonia del Norte es clave para nosotros. No perdamos de vista que tienen jugadores en los mejores equipos del mundo. Es una gran selección que se nos da bien y a quienes conocemos bastante, porque acabamos de tener un amistoso contra ellos, pero obviamente cuando es un partido por los puntos es otra cosa. Ahora es por el Mundial, sería por pasar a la siguiente ronda y son dos cosas totalmente distintas. Yo creo que tenemos opciones, pero hay que estar al máximo nivel para poder competirles.