Siempre polémico, Srdjan Djokovic no se guardó nada tras la expulsión de su hijo Novak de Australia, luego de pasar horas aislado en la frontera al intentar ingresar para disputar el Australian Open en Melbourne.
"Mi hijo ha estado en cautiverio esta noche, pero nunca ha sido más libre. A partir de hoy, Novak se convertirá en un símbolo y líder del mundo libre, en el líder de los países y pueblos oprimidos", señaló el padre del número uno del mundo en declaraciones a Telegraph.
"(Novak) demostró que incluso un país pequeño y heroico como Serbia puede tener al mejor deportista de todos los tiempos. Esto no se puede ocultar. Pueden encarcelarlo hoy o mañana, pero la verdad siempre encuentra su camino. Novak es el Espartaco del nuevo mundo que lucha por la igualdad de todas las personas del planeta, sin importar a qué Dios recen o cuánto dinero tengan", agregó el patriarca, en alusión al esclavo que luchó contra el Imperio Romano.
Srdjan Djokovic también hizo alusión a un posible conspiración contra su hijo, quien no pudo entrar a Australia por no estar vacunado, una condición obligatoria para todos los extranjeros que quieren ingresar al país oceánico. "Es posible que el mundo rico no permita que 'Nole' continúe jugando al tenis, pero revelará su verdadero rostro y así comenzará un juego mucho más serio. Por un lado, habrá miembros codiciosos y arrogantes de la oligarquía mundial, y por otro, un mundo libertario y orgulloso que aún cree en la justicio y la verdad".
Cabe recordar que Djokovic ha ganado nueve veces el Australian Open y el triple campeón defensor. De hecho, si no se soluciona el conflicto y no puede competir, corre riesgo de perder el número uno del mundo en el ranking ATP.