Nuestros perros tienen muchas tendencias únicas de ellos, las que los hacen especiales. Una de estas es el perseguir su cola. Sin embargo, ¿alguna vez te has preguntado realmente por qué lo hacen?
Ante esta interrogante, hoy te traemos algunas respuestas que quizá no te agraden tanto. De todas maneras, es importante que las conozcas, ya que así puedes cuidar a tu mascota ante posibles peligros.
¿Por qué mi perro persigue su cola?
Las razones pueden ser muchas, aunque en general no son muy positivas. Si sucede unas cuantas veces en la vida de tu perro, en instancias separadas y esporádicas, es una conducta normal.
Sin embargo, los problemas llegan cuando esto se repite varias veces, especialmente si viene acompañado, por ejemplo, de lamerse las patas o los famosos zoomies.
Tal como explica la clínica veterinaria MiVet en su blog, esta acción “a menudo se convierte en un comportamiento obsesivo que está relacionado con ciertas patologías neurológicas”. Específicamente, un desorden compulsivo.
De esta forma, enumeran siete posibles razones para que tu perro se persiga la cola:
- Falta de socialización.
- Falta de ejercicio.
- Traumas y miedos.
- Problemas hormonales.
- Separación temprana de su madre.
- Carencias nutricionales.
- Escasa estimulación mental.
Si las analizamos, es fácil deducir si alguna de estas dolencias están afectando a nuestro compañero peludo, ya que podemos ir descartando algunas en caso de que cumplamos correctamente con nuestras obligaciones hacia él, como sacarlo a pasear durante el tiempo necesario y alimentarlo correctamente.
De todas maneras, si ves que tu perro hace esto muy a menudo, lo más recomendable es llevarlo a un veterinario (especialmente si directamente logra mordérsela) o a un etólogo canino, quien te guiará en cómo evitar que esto siga sucediendo.
