“Viña, no ando solo”, advirtió Polimá Westcoast. Ya minutos antes, el escapado de los representantes de la música urbana chilena, había convocado a otro referente del género al escenario, anunciando que su show era una celebración.
Polimá Westcoast hizo su esperado debut en la Quinta Vergara, tras cinco jornadas viendo a otros de su generación cumplir el mismo sueño que él. El cantante, vestido de un impecable blanco, comenzó su show con una versión con tonos africanos de “Te quiero ver”.
La primera gran sorpresa fue la participación de Pablo Chill-e, para cantar “My Blood”. Una colaboración que terminó con polémica, luego de que en redes sociales acusaran que la voz de “Vibras” fue silenciado. Además, en sus redes sociales, el cantante también lanzó una dura acusación contra el equipo de Polimá Westcoast.
Luego fue el turno de su socio desde el comienzo en su camino en la música urbana: Young Cister. Los Broke Boyz se reunieron en el escenario para cantar “Samurai” y “Sextime”. Además, la voz de “La terapia”, junto a Standly, Marcianeke y la madre de Polimá Westcoast celebraron la Gaviotas de Oro y Plata que recibió el cantante.
“Esto no es solo para mí. Esto es todo para los artistas urbanos”, dijo, luego de recibir el reconocimiento que entrega el “monstruo” de la Quinta Vergara.
Para el cierre, junto a Pailita cantaron “Ultra solo”, uno de los hits globales de la música urbana del año pasado. Polimá Westcoast se convirtió en el primer artista chileno del género urbano en triunfar en el Festival de Viña del Mar, coronando un gran año que lo llevó a codearse con figuras como J Balvin y ser unos de los artistas con más reproducciones en las plataformas de streaming.
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